Antes que te vayas

29. Pideme lo que quieras

Besar a James había sido como una descarga de dopamina y luego, cuando por fin vi su expresión de arrepentimiento fue el preciso efecto que tienen los adictos cuando dejan una droga, saben que esta mal, que los lastima y aún así lo desean.

No supe de él después del beso, después de gritarle y marcharme sin aguardar a que diga algo. Tampoco comía con nosotros a la hora del almuerzo, había vuelto a sentarse en la mesa de los jugadores de futbol, sitio en el que no había estado desde que Nolan y Molly comenzaron a salir.

Barb había dicho que solo necesitaba colocar un dedo sobre su pecho para que él haga lo que le pida. Sus palabras habían quedado resonando desde ese fatídico día en mi cabeza.

En la escuela, escondida pero desde un lugar donde lo podía ver a la perfección le envió un mensaje.

"Molly se irá con Nolan ¿Crees que puedes llevarme a casa?"

James estaba en la cafetería haciendo la fila para pedir y la cabellera rubia de Tessa se meneaba a su alrededor. Él sonreía a cada cosa que ella decía, no sé molestaba en pedirle que quitara su mano de su hombro pero tampoco se acercaba más, sus manos estaban clavadas en los bolsillos de su jogging gris. Y sería mejor que así estuvieran porque el deseo de golpearlo se estaba formando. Odiaba que provocara sentimientos tan extremos en mi, jamás había sido así con Seth o con nadie.

Su teléfono suena en su bolsillo y yo lo observo a la distancia como lo saca y lee el mensaje, una pequeña sonrisa intenta formarse en la comisura de sus labios pero la contiene, Tessa aún estaba a su lado hablando de alguna cosa.

James comienza a teclear algo, su mensaje parecía una eternidad hasta que llega al mío.

James
Ok

Un mensaje demasiado corto para todo el tiempo que le había tomado ¿Acaso había borrado algo? No guarda su teléfono y aún con ella diciendo cualquier cosa lo mira de vez en cuando, atento por si la luz resplandecía otra vez.

Tengo ensayo crees que terminarás antes tu entrenamiento o puedes esperarme si me atraso un poco?
ya sabes cómo son de intensos los ensayos.

Abre el mensaje de inmediato, sus cejas se levantan en señal de interés en algo de lo que había dicho. Y la respuesta llega a mi teléfono en segundo:

James
No hay problema

Podía enviar un mensaje vacío y se sentiría igual de miserable que esa respuesta, pero lo había visto escribirla, su expresión de interés y sus ansias de recibir otro mensaje, eso era suficiente para cortarme el aliento y darme más esperanzas.

Puedes decir que no si no quieres llevarme
Lo último que quiero es otro reclamo sobre qué siempre te obligo a hacer cosas

Me odie en cada letra que teclee pero no podía dejar de hacerlo aún quería verlo abrir su teléfono cuando sonara y ver su rostro y saber que estaba interrumpiendo su estupida conversación con Tessa.

Él lanza un bufido de fastidio cuando lo lee y luego escribe rápido.

James
Ya dije que no me importa 

Podrías al menos fingir que te agrado no?

James
Eres realmente molesta ¿Lo sabes?

No decías lo mismo la última vez
De hecho, no hablaste mucho la última vez. Aunque no puedo culparte, tenías la boca ocupada.