STEPSIBLINGS; Hermanastros

TRATO

.・。.・゜✭・☪・✫・゜・。.

Tres días habían pasado con un Jimin enfermo, ya era jueves, y al fin estaba considerablemente mejor. Ya no tenía fiebre, ni le dolía el cuerpo; sólo le quedaba un leve dolor de cabeza, flujo nasal, y su afónica voz, que poco a poco iba volviendo a la normalidad. A pesar de las obvias mejoras, no le habían permitido asistir al colegio, ya que su mamá dijo que un mal viento podría hacer que volviera a recaer, y el señor Dong-Wook se rió, diciendo que también podría salir volando con ese viento.

Jimin se rió tanto que le dolió el estómago.

También habían acordado que tampoco iría al día siguiente, de todos modos, ya había faltado toda la semana, y un día más no haría la diferencia. Para su suerte, su compañero y nuevo amigo Soobin le había estado enviando fotos de las clases y las tareas, y Jimin las enviaba ya hechas con su "hermano" mayor al colegio. Había recibido notitas en sus cuadernos, de varios maestros, felicitándolo por seguir esforzándose a pesar de estar enfermo, y porque a pesar de no ir a clases, era el que presentaba las mejores tareas.

Por otro lado, el alfa de ojos grises había sido bastante atento y cariñoso con él, y no había tratado de insinuar ó hacer cosas subidas de tono como de costumbre; Jimin por un momento creyó que se debía sólo a que estaba enfermo, pero luego recordó lo que había sucedido el día lunes, –el segundo peor día de gripe– y se puso a llorar de la ansiedad porque el alfa le dijera algo a su madre, y después lloró más, seguro de que el castaño le tenía asco ó lástima. No sabía cuál era peor. Por suerte, el dueño de sus pensamientos había llegado en ese momento y le había asegurado que no diría nada a sus mayores, pero que quería que le dijera toda la verdad.

Y Jimin se preguntaba: ¿Qué carajos le iba a decir? ¿Cuál verdad? Eran demasiadas verdades juntas, y todas eran igual de patéticas que él.

Seguía tan perdido en sus pensamientos, que cuando la puerta se abrió y un tierno omega castaño se estrelló contra él, abrazándolo, no pudo evitar pegar un chillido asustado, que hizo reír a los dos alfas que venían de forma más relajada y tranquila detrás del castaño, e hizo avergonzar mucho al rubio.

— Nunca me imaginé que un sonido tan tierno y agudo podía salir de este omega con carácter de alfa. — dijo un divertido Yeonjun, que también abrazó al de ojos color miel, junto con su novio.

— ¡Yo tampoco! — chilló el castaño — ¡Diminnie es muy tierno! — dijo con aegyo, apachurrando con sus manos las rechonchas y rojitas mejillas del más bajo.

Yoongi reía a gusto.

— Aish... Si no Yeonjun no fuera mi hyung, y tú no fueras tan lindo, ya los hubiera golpeado. — dijo Jimin, tratando de fingir molestia.

Y si creyó que eso los intimidaría, fracasó monumentalmente, ya que sólo enterneció más a la pareja.

— Sigues un poco afónico. — dijo Yoongi — ¿Te tomaste todo el té que te hice?

El menor asintió con su cabeza.

— Prepararé más... Pónganse cómodos. — habló en tono neutro, antes de salir de la sala.

— Tu hermano mayor dá miedo. — dijo Soobin casi en un susurro.

— Es bastante serio. — corroboró Yeonjun.

— No... Sólo es celoso. Pero media vez entra confianza, es bastante risueño. Soy más serio yo. — explicó, viendo con una sonrisa por donde se había ido el alfa.

— Aigo~ Ya quisiera que mi hermano alfa me celara, pero el bobo sólo sabe golpearme en la nuca y reírse de mí. — dijo el castaño, puchereando.