𝒅𝒐𝒓𝒎𝒊𝒅𝒐𝒔

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Jimin y Yoongi fueron despertados por el insistente sonido del tono de llamada en el celular del menor; el cual de forma torpe y adormilada, contestó sin siquiera poder abrir los ojos.

— ¿Aló? — preguntó, restregándose un ojito con su mano libre.

Viéndose demasiado tierno, en opinión del alfa de ojos grises.

— Ponme en altavoz. — pidió su padre, en tono monótono.

El omega obedeció, un poco confundido.

— ¡Bueno, y ustedes niños! ¡Bajen a cenar, que ya llegó la comida y dejen de darse mimos! — prácticamente gritó, en tono burlesco, para luego colgar.

Ambos, alfa y omega, sintieron la vergüenza invadirlos, luego de las palabras tan bochornosas de su padre. Sus rostros sonrojados eran prueba de ello.

— ¿Crees que él...? — preguntó el rubio, sentándose a la orilla de la cama.

— Estoy seguro de que nos vió dormidos. — respondió a la pregunta incompleta el alfa — Ven, vamos, bajemos de una vez, antes de que suba gritando como si está perdido.

Yoongi ya se había puesto de pie, y extendía su mano hacía el menor, que la tomó sin pensarlo dos veces. Luego ambos se encaminaron hasta el primer piso, donde se soltaron antes de que sus padres los vieran; estos estaban sentados en la sala, con pizza y otros acompañantes en la mesita de centro, una teen movie reproduciéndose en la TV, y una sonrisa entre divertida y complacida en sus rostros.

Sin embargo, ninguno comentó nada.

— Pedimos pizza de peperoni y carne, con queso en la orilla. — informó la fémina — Su favorita.

Jimin hizo un sonidito de garganta emocionado, y corrió a sentarse en el suelo, frente a su madre, para estar más cerca de la comida, y poder tomarla con facilidad. Eso hizo reír a todos, pues se había visto bastante tierno haciéndolo.

Por su parte Yoongi caminó lo más relajado posible, para no demostrarle a los adultos lo avergonzado que estaba. Se sentó en el sofá indivual, no sin antes tomar dos pedazos de pizza en un plato desechable, de esos que venían con la comida, y tenían forma de triángulo.

Realmente nadie le estaba prestando atención a la película, además de Jimin; pues los adultos junto a Yoongi, conversaban de diferentes temas triviales. Entre ellos, la universidad del alfa.

— ¿Entonces se enfermó el maestro? — preguntó sorprendida la castaña.

— Eso nos dijeron... — murmuró Yoongi — De todos modos sólo se para ahí, frente a todos, a leer en tono monótono las páginas del libro de texto. Eso lo puedo hacer por mí mismo, sin tener que estar sufriendo por el dolor de trasero. — se quejó — Pero el viejo ese dijo que la asistencia también era ponderada. Lo cuál realmente me parece estúpido.

Yoongi puso los ojos en blanco, y su padre rió por ello.

No tardaron mucho en terminar de comer, pues la comida rápida, era eso, rápida de comer. Los mayores se sentían bastante exhaustos, así que en cuanto se saciaron, se pusieron de pie, para irse a su habitación, no sin antes advertirle a los menores que no se durmieran tan tarde. Aunque el único que los escuchó, fue el alfa castaño.

El alfa se quedó un par de minutos viendo aleatoriamente entre la televisión y el omega rubio, que estaba hecho bolita en el suelo, a causa del frío.

Lo más silenciosamente que pudo, se puso de pie, y subió a su cuarto para bajar un par de almohadas y una sábana. También fue al cuarto del menor por su pollito, y de forma rápida, bajó nuevamente a la sala, en donde el menor seguía en la misma posición en el mismo lugar. Yoongi aprovechó lo distraído que estaba y de forma suave le arrojó una de las almohadas en la cara, asustándolo.

STEPSIBLINGS; HermanastrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora