¡A la mierda las etiquetas!

Extra 3: Halloween

Desperté antes de que el despertador sonara y con una sonrisa me levanté sin despertar a Drake, el pobre no había dormido nada porque nos la pasamos casi toda la noche anterior jugando pictionary con los castaños.

De puntas entré a la habitación de Wyatt y con el teléfono a todo volumen coloqué la icónica canción de introducción de Nightmare Before Christmas. 

Al principio se me quedó viendo como si me hubiera vuelto loca o estuviese soñando aún, mientras bailaba y cantaba.

— ¿Qué demo...

— Vamos Tracy, ¡es hoy! — digo emocionada lanzándome a su cama y él se queja empujándome a un lado para verme.

— Tengo un mal presentimiento — vuelve a cerrar los ojos queriendo dormirse de nuevo y le jalo las mejillas. Quería molestarlo más pero el grito que se escuchó desde la sala nos hizo bajar corriendo a los dos y a Drake que chocó con una pared por ir medio dormido.

Loren tenía las manos en el pecho sosteniendo el teléfono de la casa y respiraba con dificultad, mirando un esqueleto con trozos de carne vieja aún pegada, a primera vista parecía de pie por su cuenta. Jude soltó la risa haciendo a un lado el esqueleto y colgó la llamada desde su teléfono.

— ¿No sabes que los conejitos pueden morir fácilmente de un ataque al corazón? — la regaño negando con la cabeza pero no logro evitar que se me salga una corta risa.

— ¿Te robaste un cadáver? — pregunta Drake con horror viendo el esqueleto que Mulan sostiene con cariño peinando el poco cabello que le quedaba.

— Mejor no preguntes — le aconseja Jane entrando con Mike detrás.

— ¿Ya desayunaron?, me muero de hambre — Mike bosteza como si recién hubiese despertado y camina a la cocina directamente.

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— Bien recuerden las reglas, no pueden cambiar el disfraz hasta que la fiesta comience, ni se pueden quitar o cubrir nada aunque estemos afuera comprando las cosas de la fiesta, sin excepciones — todos asentimos a las palabras de Jane mientras esta removía los papelitos en el tazón de las palomitas. 

Que todos aceptaran una ruleta rusa de disfraces fue una cosa de borrachos que prometimos el mes anterior. Habíamos escrito los papelitos y los habíamos metido en una caja donde venía una botella de vino que Loren encontró dos días antes y se emocionó obligándonos a cumplir.

Todos tomamos un papelito y lo abrimos al mismo tiempo. Diferentes reacciones de todos, yo en lo personal grité de emoción.

— Ni de broma, no — Drake dejó caer el papel al suelo y se fue a sentar al sofá seguido de Mike que con una mueca guardó su papel.

Curiosa tomé el papelito que había dejado Spretnat y mi felicidad aumentó el doble. 

— ¡Tienes que hacerlo! — le grito señalándolo con emoción.

— De ninguna forma, no importa que hagas yo jamás...

*Dos horas después*

— ... ya no quiero ser tu novio.

— No seas grosero te ves increíble. Además somos de la misma película.

No les miento, me he dado muchos placeres en mi vida, pero ver a Drake vestido como Sally entró en el top cinco. Ni siquiera sé como entró en el vestido y les aseguro que Jude hizo un trabajo ejemplar en el maquillaje. 

— Bien entonces tu vístete como muñeca y yo me pongo el saco con hoyos.

— No es un saco con hoyos, ¡soy el Oogie Boogie! — digo emocionada dando saltitos.