No puedo ocultar que te quiero (Cross 2)

84. La entrevista

6 días para la final del Mundial

Mañana nos jugamos el pase a la final del Mundial. Después de mucho esfuerzo y mucho trabajo, nos enfrentamos a los italianos. No les tengo nada de miedo, la verdad. Ya que hemos llegado hasta aquí, no nos va a parar nadie. Estoy haciendo un campeonato fantástico. He podido marcar 2 goles, aunque la estrella es Marco, ha renacido y se va a llevar de nuevo la Bota de Oro, como en el último mundial.

Tengo muchas ganas de ver a mis niñas. Conforme pasan los días, la espera es más insoportable, sobre todo cuando veo al resto de compañeros con sus familias. Mis padres y mis tíos han viajado hasta aquí. Mi madre no quería venir por no dejar sola a Maya, pero ella les ha convencido diciéndoles que yo les necesitaba más. Por suerte, Isco se ha vuelto de sus vacaciones para estar estos días con ellas, algo que le agradezco un montón. Tengo suerte de tener estos buenos amigos.

Verlas a través de videollamada ya no es suficiente para mi. Necesito besarlas, abrazarlas, estar con ellas. Las echo tanto de menos que me duele muchísimo el estar tanto tiempo tan separados. 

Ahora mismo me dirijo hacia una sala donde la cadena de televisión que retransmite el Mundial va a entrevistarme. Va a ser una entrevista en directo. Aquí son las 13.00 de la tarde, y en España son las 21.00 de la noche. Maya me ha dicho que verá la entrevista, así que no puedo evitar estar algo nervioso sabiendo que ella me estará viendo. Llego hasta la sala, y me están esperando en la puerta.

- Marcos, bienvenido –me dice uno de los asistentes estrechando mi mano- sígueme, por favor

Entro a la sala y está todo dispuesto para la entrevista. Saludo a los periodistas y colaboradores que me la van a hacer. Uno de ellos lo conozco de casi toda la vida, como aquel que dice, porque es un antiguo futbolista del Real Madrid, y  lo he visto jugar un montón de veces. Nos saludamos y estrechamos las manos. Me acompañan a mi sitio y una chica me "maquilla" un poco antes de salir en televisión. A las 21:30 en punto entramos en directo en la franja de deportes. Empiezan a preguntarme lo habitual en estos casos, que como veo el campeonato, que si estamos nerviosos por mañana, que como me veo yo...lo normal de siempre.

- Bueno Marcos –me dice en esta ocasión el ex – futbolista- ¿cómo has vivido estos días alejado de la familia?

- Pues mira, lo he llevado como he podido. Los primeros días que estábamos aquí solos, pues fueron difíciles, pero ahora que tenemos la suerte que desde octavos nos acompaña nuestra familia, pues se lleva de otra manera

- Aunque en tu caso, creo que eres el que peor lo está llevando de todos

- Bueno... si...

- Si, porque tú hace poco has sido padre

- Si, mi hija nació 2 días antes de incorporarme a la concentración de la selección y la verdad es que no he podido estar mucho tiempo con ella...y al ser tan pequeña tampoco ha podido estar aquí... y la echo muchísimo de menos -digo con un nudo en la garganta

- ¿Se pasa mal Marcos , cuando uno se tiene que ir dejando a un bebe tan pequeño?

- Si se pasa mal...acaba de nacer, es tan pequeña, y sientes que vas a perderte todas sus primeras veces, la veo todos los días por video llamada, pero no es lo mismo... además es mi primera hija y... - casi ni puedo hablar- pero bueno, tengo una mujer que es absolutamente extraordinaria que es la que me da ánimos todos los días y me dijo que tenía que aprovechar esta oportunidad y disfrutarla...

- ...y lo estás haciendo...

- Lo estoy haciendo, de hecho  cuando salgo a jugar lo hago pensando en mi hija, en que esté orgullosa de mí, porque ella y mi mujer son las que me dan la fuerza para seguir adelante y para luchar todos los días por mi sueño, que es ser campeón del mundo

- Te entiendo perfectamente Marcos...es muy difícil ser futbolista, la familia lo pasa mal, y en tu caso, y en tu situación, entiendo que hubiera días...

- ...que hubieras deseado teletransportarte para ir a verlas...pero bueno, tengo que dar gracias, porque soy un privilegiado, puedo hacer lo que me gusta y tengo el apoyo de mi familia y por eso estoy tranquilo

- ¿Cómo se llama tu hija Marcos?

- Tamara, se llama Tamara...y seguramente si no está dormida me estará viendo

- Pues Tamara, no creo que puedas entendernos todavía, pero que sepas que tu padre es uno de los mejores futbolistas del mundo

Le agradezco sus palabras y la entrevista termina aquí. No puedo evitar emocionarme un poco al acordarme de mis niñas. Me despido de ellos y salgo de la sala camino del comedor porque es ya la hora de comer. Mi móvil suena y lo saco del bolsillo para cogerlo. Sonrío al ver que es Maya.

- Hola abejita

- Hola amor mío. ¡Que guapísimo sales en la tele!

- Tú que me quieres mucho

- Eso también... me ha gustado mucho la entrevista amor

- Me alegro. Estaba un poco nervioso, sobre todo cuando me han preguntado por la niña... os echo mucho de menos

- Y nosotras a ti. Ya queda menos Marcos, el último empujón

- Si, lo sé. Y Maya, después de esto vas a ser mía para siempre

- Si ya soy tuya desde hace tiempo

- Te quiero Maya, te quiero con toda mi alma. Me muero ya por casarme contigo

Seguimos hablando un rato más hasta que llego al comedor. Voy a ir a sentarme con Marco, como siempre. Aunque aquí todos somos una piña, al final siempre acabamos juntos, también porque somos familia y estamos acostumbrados a esto.

- ¿Y la entrevista? - me pregunta Marco

- Bien, lo de siempre, ya sabes. Aunque cuando me han preguntado por mi niña casi lloro...

- Normal. Te entiendo. Por lo menos mis enanos han podido venir

- Pues si. María me dijo ayer que está siendo la mejor prima del mundo

- Si, se está tomando en serio su papel... Oye, cuando volvamos a España tenemos una boda

- Si. Estoy deseando casarme con ella. Tengo unas ganas

- Pues cuando la veas con el vestido...

- ¿Tú lo has visto? - le pregunto alucinado. Marco se ríe

- ¡Pues claro! Soy su hermano

- ¿Y cómo es?

- Sabes que no te lo voy a decir... pero te aconsejo que tengáis noche de bodas... Claudia y yo nos quedamos con Tamara... - y me guiña un ojo mientras se ríe