Se supone que mañana le dan el alta a Maya. Los médicos dicen que está su evolución es muy buena. Así que mañana martes podremos irnos ya por fin de aqui. Una semana lleva mi niña en el hospital. La han estado controlando bastante y eso me deja más tranquilo. Entre todos nuestros amigos, se han turnado para no dejarla sola en ningún momento, incluso por la noche.
El fin de semana no pude estar con ella porque jugábamos en Vitoria, partido, por cierto, que ganamos 2-0 con goles míos y de Marco. La rabia que teníamos acumulada la sacamos en el partido y no hubo quien nos parara. Mi madre también ha estado con Maya. Les hemos contado a mis padres que está embarazada y se han puesto locos de contento. Aunque sea pronto para decirlo, teníamos que llevarnos una alegría.
Aprovechando que estamos en el hospital, le han hecho el primer control de embarazo. La ginecóloga que llevó los embarazos de Claudia, va a llevar el suyo también, cosa que me alegra porque es un encanto de mujer. Nos han dicho que el bebé nacerá sobre el 20 de junio.
Ahora estamos en la habitación, Claudia y yo medio discutiendo.- Que no Marcos -dice ella- que se viene mañana a nuestra casa
- Pero vamos a ver, que tú trabajas -le respondo
- ¡Y tú también! Yo puedo trabajar desde casa y si tengo que ir a Valdebebas dejo a los niños en la guardería de allí que para eso la han inaugurado este año
- Pero es que yo quiero que esté en mi casa para estar con ella, quiero cuidarla
- ¡ Y nosotros también! Joder Marcos, que cuando te vayas a entrenar va a estar sola, y por lo menos, conmigo no lo va a estar, y también están María, Isa y Andrea
- Oye chicos -dice Maya mirándonos- no sé si os habeis dado cuenta, pero estoy aquí
- ¿Y? -le responde Claudia sin hacerle caso
- Que yo debería decir algo, ¿no?
- No -le contesto yo
- Sabes que es lo mejor Marcos -contesta Claudia- yo voy a estar en casa
- Vale, tienes razón, pero yo me voy también con ella, no pienso dejarla -le digo cruzandome de brazos
- Vale, contaba con que vinieras -contesta ella rodando sus ojos
- Perfecto
- Ehhh -dice Maya- que estoy aquí
- Lo siento cariño -le digo mientras la beso- sentimos no pedirte opinión, ¿vale? pero es que tienes que cuidarte mucho y hacer reposo por lo menos un mes, y esto es lo mejor, ¿vale?
- Si teneis razón -dice ella asintiendo
- Y Maya, cuando ya te encuentres mejor...-le digo nervioso- ¿querrás venirte a vivir conmigo?
Maya me mira con los ojos muy abiertos, suelta un gran suspiro y su mirada empieza a brillar. Una lágrima cae por su mejilla.
- Si -me dice- claro que si cariño
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No puedo ocultar que te quiero (Cross 2)
DragosteMarcos Llorente vuelve a Madrid después de 2 años en el Arsenal. Desde que tuvo un fuerte desengaño amoroso, no ha vuelto a creer en el amor. Hasta que la castaña de ojos verdes se cruza en su camino y sin darse cuenta empieza a caminar descalzo po...