Laberinto y el regreso de Sarah.

Capitulo 63: Un viaje a travez del tiempo parte 4

Las acciones de Hermès le habían pasado factura pues tenia que reconocer que su caballerosidad era admirable, pero a la vez sentía miedo por que el tratar con una Pitonec, no era tarea fácil y menos para alguien que en su vida había visto a una.

_Tienes que reconocer que eres el único del grupo que puede hacerlo- dijo Hoggle.
_Hermes de verdad no tienes que hacerlo- dijo Sarah.

Todos regresaron a verla con cara de sorpresa ante su comentario.
_¡Sarah no vengas con tus negaciones ahora!- hablo Hoggle.
_¡No Hoggle no voy a permitir que lo obliguen si el no quiere hacerlo!.
_De que estas hablando, ya escuchasteis lo que acaban de decir es necesario que un hombre de este grupo convenza a la Pitonec de ayudarnos.
_Si, pero no puedo darme el crédito de que salga herido por mi culpa si algo llega a salir mal.
_Entiendo que hay riesgos pero no hay mas opciones Sarah.

Hermès se acerco a Sarah y tomando su mano con la debida distancia por respeto al rey la miro a los ojos.

_No quiero que te sientas culpable por esto Sarah, ellos tienen razón yo soy el indicado para este trabajo y quiero que sepas que no voy a permitir que el amor que sientes por Jareth muera por mi, el rey merece tu amor y se que el es merecedor de tu dulce corazón y hermosa mirada, la vida me a dado el placer y el honor de haberte conocido y aunque solo fue un beso para mi es mas que suficiente.
_Pero yo no quiero que te lastimen, no quiero que lastimen a nadie por mi culpa.
_Tu no tienes la culpa de nada de lo que esta pasando en este mundo, siempre habrá guerra y siempre habrá alguien que va querer destruirnos, estoy seguro que el rey se abra ganado a una reina maravillosa y excepcional, no quiero que te culpes mas por esto, ¡Déjame ayudarte! ya que es la única forma en la que podrás arreglar el entuerto que se genero en tu pasado.

Sarah no sabia que decir ante las palabras de Hermès, sus ojos reflejaban el deseo que sentía por ayudarla a resolver este conflicto, pero Sarah tenia miedo de que no funcionara aquel plan y que todo se derrumbara en pedazos.

_El tiene razón My Lady debe confiar en que este noble caballero os ayudara- dijo Sir Didymus.
Sarah acento con la cabeza de forma afirmativa y Hermès sintió alivio al saber que Sarah confiaba en el.

Por otra parte.

Fiona había llegado a los terrenos del castillo, tapada de pies a cabeza con un atuendo dorado al estilo árabes, que le cubría los su cabello y su rostro también.

Quería pasar desapercibida entre la gente del pueblo ya que su presencia haría alborotar a mas de un aldeano o goblin, pero su intento por obtener información sobre la gema, seria derrocado gracias a la poción que Dayla había creado. Cuando bajo del cabello en el que se encontraba montada, camino por el pueblo observando a los aldeanos con desdén, mientras que ellos ignoraban su presencia y continuaban en sus labores cotidianos. La aldea goblin quedan muy cerca del pueblo del Undergraund, y para Fiona su objetivo más grande eran los goblins quienes siempre obtenían información de primera mano, sobre los acontecimientos ocurridos en el reino de Jareth, pues ellos eran los primeros en enterarse de todo.
Los goblins en la aldea intentaban seguir en sus labores con total normalidad, aunque sentían miedo por que sabían que Fiona pronto se aparecería frente a ellos, y claro estaba que ella no iba a descansar hasta sacarles información, pero aun así los goblins confiaban en la poción que habían ingerido por lo que trataron que todo se viera lo mas normal posible.
Cuando Fiona llego a la aldea goblin, las puertas se abrieron de par en par dandole acceso sin necesidad de usar magia, los goblins mientras seguían en sus labores, sintieron una energía negativa muy fuerte en el ambiente, tal vez el traje ayudaba a Fiona a despistar a los del pueblo, pero los goblins tenían la habilidad de poder sentir las malas energías a su alrededor y eso a Fiona se le olvido por completo.

Un goblin de mediana estatura regresó haber a la mujer que había entrado en la aldea, y de reojo vio a otro goblin que se encontraba cerca de el con los ojos abiertos como platos. De inmediato uno de ellos mando avisar al rey de que alguien había llegado a la aldea y todos los goblins a pesar de que intentaban ignorar su presencia sabían que era ella y que no tardaría en comenzar hacer preguntas.

_¡Majestad! ¡Majestad!- gritaba uno de los guardias del castillo.
_¿Que ocurre?- pregunto Jareth con severidad ante su exaltación.
_¡Ella esta,ta,ta,ta,ta aqui ma, ma, ma, majestad acaba de entrar a la aldea!- dijo el guardia tartamudeando del miedo.

Jareth miro a Dayla y Pecival al escuchar que Fiona había llegado a la aldea, que pálido con un muerto y sintió que el corazón se le salía por la garganta.

_¡Ay no!- dijo Percival con los ojos en blanco .
_Sera mejor que guardes la calma y no te alteres Pervical.
_Es que tu no lo entiendes, ella sabe que la traicione y si me encuentra aquí sera capaz de cortarme la cabeza en frente de todos- dijo Percival.
_¿Por que estas tan seguro de que es ella?- pregunto Jareth al guardia.
_Majestad usted sabe mas que nadie que nosotros percibimos las malas energía, en este caso el ambiente esta impregnado de ello.
_¿Vino vestida como duquesa o como una forastera?- pregunto Percival.
_Pues viene puesto un vestido dorado con varias joyas a su alrededor pero eso si el rostro lo tiene tapado al igual que su cabello- dijo el guardia.
_¿Viene sola o acompañada?
_¡Sola!
_¡Entonces si es ella!- contestó Percival___Si viene por información ella no se va a dar el lujo de preguntarle directamente al rey sobre la gema, primero por que si lo hace se meterá en serios problemas y segundo viene sola, así por que su modo de vestir ella no quiere que sepan quien es, es un hecho que si muestra su rostro los goblins van a querer huir.
_Entonces que hacemos?- pregunto el guardia.
_Sigan en sus puestos no le den la mas minima advertencia de miedo, por que eso los condenara si ella sabe que ustedes la reconocieron- dijo Percival.
_Ya escuchasteis así que dile a los demás que sigan en sus labores- dijo Jareth.

El guardia salió del castillo y con mucha cautela mando a informar a todos los goblins que mantuvieran la calma y que siguieran en sus trabajos sin presentar el más mínimo miedo ante su presencia.