Laberinto y el regreso de Sarah.

Capitulo 77: Un conde bien muerto pero vivo.

Los guardias que vigilaban el calabozo despertaron después de que el efecto del trago que habían ingerido había desaparecido, cuando se levantaron del suelo vieron la puerta del calabozo abierta y al entrar rápidamente se llevaron un gran susto al ver que las prisioneras ya no estaban.

_¡Fiona nos matara!- dijo uno de los guardias asustado.
_¿Que vamos hacer?- dijo el otro guardia.
_¿Y por que me lo preguntas a mi?.
_Se supone que los dos estábamos a cargo de vigilarlas y ahora ya no están.
_Alguien debió liberarlas.
_¿Pero quien?.

Los guardias estaban tan perplejos por los sucedido, que comenzaron a sacar conclusiones que no encontraban, hasta que vieron una botella de trago tirada en el suelo muy cerca de donde ellos se encontraban.

_¿Acaso este no es el trago que Jefry nos ofreció?- dijo uno de los guardias mientras recogía la botella del suelo.
_¡El mismo!- contestó el otro guardia.

Uno de ellos olió el trago y luego miro a su compañero de guardia con cara de estupefacto.

_¿Que ocurre?.
_Ha este trago le echaron una poción para dormí.
_¿Estas seguro?.
_Si, huele a ramas de valeriana y miel.
_Espera un momento... ¿De donde Jefry sacaría una poción así?.
_En este palacio solo hay una persona que tiene esta poción, y estoy seguro que esa persona cuando revise su están se va a llevar una enorme sorpresa.

Los guardias se miraron las caras y salieron corriendo del lugar espantados de lo que había ocurrido. 

Por otro lado Danesa había logrado llegar al palacio pero esta vez no tenia pensado esconderse de nadie, su ira había aumentado por cada paso que daba, su corazón se aceleraba como un caballo descarriado y cuando llego a las puertas del palacio con ayuda de la magia durmió a los guaridas que estaban al frente de la puerta principal dejándolos sumidos en un sueño profundo. 
Cuando llego a la entrada del palacio tomo una de las espadas que se encontraban en el suelo y entro mirando fijantemente las escaleras que conducían al segundo piso donde el recuadro del príncipe Antony se encontraba. Subió las escaleras a hurtadillas y camino por los pasillos lentamente esperando a que alguien intentara atacarla, pero para su suerte nadie se encontraba presente y eso le facilito mas las cosas a la reina Danesa. 

Sarah y los demás llegaron al castillo y encontraron al los guardias dormidos en el suelo. 

_¿Que les paso?- pregunto Sarah.

Harolg se acerco a ellos se levanto mirando a los demás con asombro. 

_¡Están dormidos!.
_¿Estas seguro?- pregunto Sirilius.
_Si, al parecer la reina los durmió.
_¡Miren! A ese guardia le falta una espada- dijo Jefry. 
_¡Oh no!- dijo Sarah caminando hacia la entrada pero Harolg la detuvo. 
_¡No Sarah no vayas!.
_¡La matara!- dijo Sarah exasperada.
_Yo lo se pero si vamos es como meternos en la boca del lobo y recuerda que ella dio una orden y hay que cumplirla- dijo Harolg intentando hacer entrar en razón a Sarah. 
_¡Entonces que! ¿La dejaremos morir?. 

Harolg miro a Sarah a los ojos por unos segundos y luego prosiguió. 

_¡Bien! ¡Sirilius! cuida bien de Sarah y llévala al castillo del rey Jareth, Jefry y yo iremos por la reina. 
_¡Que! ¿Te has vuelto loco?.
_No dejaremos sola a la reina pero tampoco deshonraremos su pedido, hagan lo que les digo y nos veremos en el castillo.

Sirilius tomo a Sarah del brazo y le rogo que la siguiere mientras Harolg y Jefry entraban al palacio. 

_¿Que haces Harolg?- pregunto Jefry sin dar crédito a lo que estaba ocurriendo .
_¡La salvaremos Jefry!.
_¡Ah ahora si cambiaste de opinión!

Harolg miro por todos lados y luego y arrastro a Jefry hasta unos gruesos pilares para que nadie los viera.

_¡No te hagas el iluso Jefry! Ambos sabemos que todo lo de Fiona es una vida llena de mentiras, la reina Danesa descubrió el cuadro del príncipe Antony, en el palacio nadie se atrevía hablar de este asunto antes, tengo que reconocer que yo fui el primero en negármelo pero es un hecho que el sigue vivo. 
_¿Y por que no dejasteis que Sarah la ayudara?.
_Por que la reina Danesa dio una orden y debemos obedecerla, no podemos permitir que Sarah malaguaste sus poderes no es el momento aun. 
_Pero estamos hablando de Fiona...¿Por que esperar?.
_La vida de alguien inocente corre peligro, si el príncipe sigue vivo significa que esta en alguna parte del palacio, debemos ayudar a la reina a encontrarlo.
_¿Por que estáis tan seguro de que esta aquí? .
_Cuando la reina menciono lo del cuadro quede patidifuso Jefry, había olvidado por completo el reglamento que tiene la realeza cuando un noble muere, ese cuadro permaneció hay mucho tiempo, mas del luto que Fiona le había dado a quien supuestamente era un conde. 
_Entonces tu crees que ella...
_Lo debe tener encerrado en alguna parte del palacio.
_¿Entonces que haremos?- pregunto Jefry.
_Primero buscaremos a la arpía.
_¿Para que?.
_La vamos a dormir Jefry antes de que lastime a la reina. 
_¿Crees que sea posible?.
_Solo puedo hacer dormir a doncellas, pero si logre que mi canto hiciera dormir a la reina Danesa es muy posible que funcione con Fiona también. 

Sirilius y Sarah caminaban por un camino lleno de arboles con espinas cuando en eso Sarah se detuvo a medio.

_¡Sarah debemos seguir!
_Como puedo seguir si ella esta en peligro.
_Harolg y Jefry la ayudaran Sarah.
_¿Sigo sin entender que es lo que ocurre? ¿Qué es lo que esta pasando Sirilius?.

El duende miro a Sarah y luego suspiro lentamente.

¡Esta bien te lo contare! Pero quiero que me prometas que vendrás conmigo al castillo de su majestad. 
_¡Te lo prometo!- dijoS Sarah alzando su mano en señal de juramento.

Sirilius se acerco a uno de las arboles espinosos y miro las hojas marchitas que caían de ella. 

_El alma es la esencia mas pura que existe en el mundo, capaz de llenar de amor a un imperio y destruirlo a la vez, quien ama no se llena el alma de odio, quien ama no oscurece su corazón, estas hojas demuestran que el alma de Fiona esta marchita, y el árbol representa a la reina Danesa firme y fuerte ante los problemas. En el palacio nadie habla de este tema Sarah por miedo a lo que Fiona podía llegarnos hacer, por eso tanto Harolg, Jefry, yo y otros seres de este mundo, nos negamos a creer que ella hubiera sido capaz de tal cosa, pero que podíamos hacer era nuestra vida o la muerte. 
_¡Sigo sin entender!- exclamo Sarah.
_Cuando Fiona se caso con el supuesto conde del recuadro, muchos de los que estuvimos presentes en la ceremonia sabíamos que ese matrimonio no duraría mucho tiempo, el conde actuaba muy raro mas de lo normal, en su rostro se podía ver su angustia y desespero. Fiona era demasiado cruel con nosotros a tal punto de maltratar y castigar a quien jamás le faltaron al respeto, pero aquellos que ganaban su confianza debían mantener ese récord a como diera lugar. 
Harolg fue uno ellos...como el lograba dormir a las doncellas que intentan conquistar el corazón del conde, Fiona lo condecoro como su mas fiel ayudante y por eso el se salvo múltiples veces de los castigos de Fiona. Todo iba normal hasta que una tarde el conde desapareció y no supimos nada de el hasta dos semanas después cuando Fiona entre falsas lagrimas nos informo que el conde había muerto por causas naturales, pero todos sabíamos que no era verdad nadie en el palacio creyó una sola palabra de lo que ella dijo.
_¿Y por que no dijeron nada?.
_¡No podíamos hablar Sarah! Era nuestra vida la que estaba en riesgo, Harolg trato de negar muchas veces la posibilidad de que el conde estuviera vivo, yo al menos sabia la verdad pero también tuve que callar. 
_¿Y por que la reina Danesa dijo que el no era un conde si no un príncipe?.
_Cuando la reina de Ungria dio a luz a un niño ese bebe desapareció cuatro días después de que naciera, nadie supo la razón ni de su paradero por mucho tiempo, hasta que la reina Danesa lo reconoció en el recuadro del segundo piso. La actitud del conde cuando estaba en la mesa era extraña, estoy casi seguro que el intentaba pedir ayuda pero nadie podía hacer nada, la regla de la realeza es que los condes se sientan siempre del lado derecho de la condesa, en este caso el se sentaba del lado izquierdo de ella. Algo no cuadraba bien hasta que una noche el mis conde intento escapar del palacio y Fiona lo capturo infraganti...  una semana después el desapareció y Fiona no quito su retrato de la pared como dictaba la etiqueta real ante la muerte de un noble, créeme Sarah la reina Danesa sabe quien es el y parece que la verdad la saco de sus casillas, pero no me preguntes la razón solo ella lo ha de saber. 

Sarah quedo helada como un cubo de hielo.