Cap. Especial. Kennet

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- ¿Enrique? - mire de soslayo a Jace, no muy convencido.

- ¡Ese! - gritó encantado.

- No lo creo - añadió Percy desde uno de los sillones - demasiado obvio. Apostare a que el asesino es la desquiciada de Antonieta.

- No es ninguno - Ender chasqueo la lengua - es el padre Juan.

- ¿Cómo va a ser él? ¡Es un sacerdote! - Thim lanzo una palomita al ojigris.

- ¡Los sacerdotes siempre son los culpables en esto! Es obvio.

Me levanté para ir por un poco más de helado. ¿Tiempo de calidad? Solemos tenerlos, saliendo a comprar, yendo a reuniones, platicando y viendo películas, como en este momento. Tantos años estando juntos y peleando en entrenamientos nos han permitido sentir la calidez y comprensión de una familia.

Llegué a la nevera y tomé el envase de coco - frambuesa.

¿Será demasiado comer otras 3 cucharadas? No creo.

- Tiene que ser una broma.

Me giré al escuchar la voz de Atenea justo atrás de mí, sin embargo, no hay nadie. Se supone que Atenea esta fuera de casa, entonces ¿porqué tendría que escucharla? Tal vez estoy alucinando.

Parpadee para despejar mi mente y acomode todo como estaba.

- ¿Me trajiste algo? - Thim pregunto sin dejar de ver la televisión.

- No me avisaste. Obvio no.

- Pésimo servicio - hizo un ademan con la mano y sin inmutarse continúo robando las palomitas de Percy.

Retomé el hilo de la película fácilmente. La trama se desarrolla en un pueblo ubicado en algún lugar de España, donde habían encontrado diversos cuerpos con claras señales de haber sido usados para rituales, nada mal.

Pasados unos minutos me empecé a sentir extraño, con cierta incomodidad. Algo no está bien.

- ¡Por el arcángel Raziel! - Ender se quejó por el sonido del timbre justo cuando iban a enseñar al culpable.

- ¡Voy! - Daemon bajaba la escalera seguido de Tobías con unos audífonos - ¡Que haces aquí!

Percy detuvo la película y después de compartir una mirada rápida nos asomamos para ver a Gerard en la puerta.

- ¿Cómo están? - saludo a cada uno de nosotros.

Luca salió del despacho y saludo al brujo; son amigos antiguos, en realidad desde generaciones atrás. Es algo extraño, tomando en cuenta que pocos brujos se quedan a ver envejecer y crecer a las familias mortales.

- ¡Justo recibí la llamada! ¿es cierto?

- Algo hay de eso.

- Sigan con lo suyo - comento papá abrazando a Gerard - hablaremos en mi despacho. Si su mamá pregunta, díganle quien llego.

Se perdieron en el pasillo y escuchamos la puerta cerrarse.

- Tranquilo...

Moví de un lado a otro la cabeza, otra vez estaba pasando.

Regresamos a terminar de ver la película y después de que concluyera, cada uno saco su móvil para checar las redes sociales y eventos próximos.

- Te parece si nos vemos...

Sobe mi cabeza. Sin duda está sucediendo algo.

Me levanté y camine hacia el patio en busca de aire fresco; tal vez solo he estado sometido a demasiado estrés o estoy próximo a sufrir esquizofrenia.

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