Capítulo 19

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Al aproximarnos a casa lo único que quería era dormir, sentía como si todas mis energías hubieran sido drenadas.

Tratar con esta gente será desgastante.

- Kate, ¿Por qué los Herondale se presentaron como si fuera la primera vez que los veía?

- Porque se supone que nosotros te cuidamos todo este tiempo. Nadie sabe ni debe saber jamás que te encontraste con ellos - suspiró - sería nuestro fin.

- Lo entiendo - afirmé y mantuve la mirada en el exterior.

Todos creen que los Morgenstern son personas magníficas, poderosas y correctas, claramente capaces de controlar a 7 adolescentes, educarlos, hacerlos las personas más maravillosas de este planeta... Pero no es así. Siguen siendo seres humanos, personas que cometen errores, se arrepienten, aprenden y disfrutan.

- Escucha - se giró a verme - sé que probablemente empezamos con el pie izquierdo, pero me gustaría que lleváramos todo con calma, seremos familia.

- Claro, no tengo ningún problema - afirme, soltando un bostezo - De hecho, también me gustaría que nos llevemos bien, no sirve de nada que nos matemos entre nosotras y dejar a los chicos contra la espada y la pared.

Ella me sonrió, complacida de que comparta su opinión.

- Estoy de acuerdo - miro a su marido y sus ojos brillaron - por cierto, lo hiciste muy bien.

- ¿Lo hice? - enarqué una ceja acompañada de una carcajada - ¡Tú lo hiciste! Me encantó como trataste el tema con la señora Anna... Ella sí que es terrible.

- No es mala persona, solo es un poco... envidiosa - encogió los hombros.

- ¿Por eso quería que se casarán Daemon y su hija? ¿Por poder?

El solo imaginarlos me hacía entrar en conflicto mentalmente, son como el agua y el aceite.

- Algo así... Ella cree que, si casa a una de sus hijas con alguno de nuestros herederos, le asegurará mayor fortaleza ante el resto de los Nefilim, así como poder demostrarles a todos que educaron a unas princesas.

- Pero todos se han negado a aceptarlas - soltó Luca con una voz risueña - hace 1 año fue la propuesta para con nosotros, 6 meses después fue con los Wang, pero tampoco les funciono y ahora parece ser que su víctima es Dylan.

- No puedo creerlo... Que humillación.

- Jajaja que te digo, no queremos que nuestros hijos tengan que lidiar con ellas y sus egocéntricas personalidades - Katalella parece más tranquila y joven, tal como la pintura que vi de ellos en la sala.

- ¿Egocéntricos ellos y no todos ustedes? Jajaja, lo escucho y no lo creo.

- Bien, tal vez la palabra que debí usar es "mimado" - soltamos conjuntamente una carcajada.

Al llegar todos estaban en la sala esperándonos. Empezaron a hacer preguntas todos al mismo tiempo por lo que tomé mi cabeza entre las manos y le pedí a la madre de familia que les explicará.

Salí en buscar de mi habitación y al entrar simplemente me acosté, cayendo en un sueño profundo.

°°°

- Psss.

- ¿Está respirando?

- Claro que está respirando... Creo que está en la etapa de sueño profundo.

- ¿Qué te lo indica? ¿El que esté babeando sobre su almohada?

Me giré y quejé, ¿Quién molesta mi sagrado tiempo de sueño?

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