Los Morgenstern

Capítulo 33

- ¿Es agotador? - le pregunté a Tobías mientras nos dirigíamos de manera discreta a la cocina. Aún nadie más sabía que había llegado y si pudiera mantenerlo 5 minutos más así, sería maravilloso.

- ¿El qué?

- Sentirlos.. sus emociones...

- Normalmente no - tomo una fruta y empezó a masticarla - verás, anteriormente uno o dos eran los que estaban tensos o sentían algo con mayor intensidad, por lo que podía relajarlo sin miramientos pero desde que llegaste todos están mucho más... Intensos. Controlar sus emociones me es desgastante, por lo que solo interfiero en situaciones que son muy complejas.

- Lamento ser la causa de su estrés - comente,  mientras tomo algunas uvas.

- Está bien, es entretenido de alguna manera. Y no solo porque eres una chica, sino que creo saber por qué fuiste elegida - su mirada se volvió clara, transparente.

Suena seguro en sus aseveraciones. Quisiera saber cómo es que parece tan seguro...

- Es bueno ver a la chica prodigio de regreso - un Jace sudado apareció en la entrada. Sus ojos están llenos de molestia.

- Hola, también me alegro de verte.

- ¿Somos un juego para ti? – soltó sin una pizca de tacto.

Quiere provocarme. Quiere que lo rete para que pueda sacar toda su frustración, pero estoy segura de que no le durará demasiado. Todo es derivado de su preocupación.

- Jace, basta - intervino Tobías - seguro tuvo una buena razón.

- No la defiendas.

Escuche el timbre de la casa, pero ninguno le dio verdadera importancia porque pese a querer alejarme de aquí, Jace sigue queriendo pelear y Tobías solo le contesta que debe ser menos exagerado.

Llamo nuestra atención que se escuchó revuelo en la sala y pocos segundos después, entro el cónsul echando fuego.

- ¿Qué diablos crees que has estado haciendo? – camino directamente hacia mí.

Instintivamente, ambos chicos se pusieron adelante, evitando que se acercará más.

- ¡Ya te dije que ha estado todo el día aquí! ¿Cuál es tu problema? - Katy lo alcanzó e hizo que se girara hacia ella.

- Está conversación será entre la chica y yo - soltó ponzoñoso.

- Todo lo que necesites hablar con ella, será mejor que lo comentes con nosotros antes - Luca apareció de traje junto con Daemon. Seguro van llegado de la empresa.

- Si quieren saberlo... Así será - nos fulmino con la mirada - ¿Qué te encontrabas haciendo a las 7 de la mañana?

- Despertando - comenté como si fuera lo más obvio del mundo.

Todos están atentos, esperando el momento para intervenir.

- ¿Entonces porque alguien me aseguro que te vio salir del bosque acompañada de un lobo?

No me hace falta ver la cara de mi familia para saber qué la idea no les hace la menor gracia. Esto no era parte del plan.

- Probablemente me confundieron - solté con simpleza y una mirada confusa.

Necesito jugar bien mi papel si quiero salir lo menos raspada posible.

- ¿Entonces me puedes explicar esto? - saco un sobre y me lo tendió.

Tobías lo tomo antes y saco su contenido.

Son fotografías, fotografías del cuerpo de la persona que fue asesinada cuando Daniel y yo estábamos agazapados... pero no está como yo lo había dejado, sino que se ve completamente drenado. La marca en su cuello delata al segundo asesino.