El Amor Es La Magia Más Poderosa~ [{Severus Snape y tú}]

Capítulo 39

SEVERUS

Cuando llegamos a Hogwarts se me acercó Lucius.

- Hey, ¿Como te fue?.- Dijo mirándome.

- Genial, más que genial sobretodo por qué cierto rubio me había dicho que me ayudaría pero se fue con una chica.- Él río.

- Lo siento, pero es que me pidió ir con ella y no pude negarme, de todas formas, ¿Conseguiste todo?.- Asentí.- Suerte Snape.- Dijo palmeando mi hombro.

Después de comer, salí rápidamente hacía la enfermería, ahí estaba ella mirando hacia la ventana.

- Hola.- Ella se giró hacia mí y me sonrió.

- Hola, ¿Cómo estás?.- Me pregunto.

- Bien, recuerdas que te dije que te tenía una sorpresa en Hogsmeade.- Ella sonrío y asintió.- Pues bueno, aquí está.- Saque de mi maleta su pastel de calabaza junto con sus golosinas.

- Gracias Sev.- Me dijo, literalmente me obligó a comer con ella, cuando terminamos saqué la cajita donde está el collar.

- También...tengo otro regalo.- Me miró y yo aparte la mirada. Le dí la caja y ella la abrió, cuando la miré vi que si sonreía al ver el dije.

- Es muy bonito.- Se lo puso.- Nunca me lo quitaré.- sonrió.

- De hecho, hay otra cosa que quiero decirte.- Me miró con una sonrisa y suspiré, ya no recordaba nada de lo que había ensayado.- P-Pues ¿t-tu recuerdas e-el b-b-beso?.- Nos sonrojamos y ella asintió.- Y-Yo había tomado Felix felicis y te besé y lo que quiero decir en realidad es que tú...- Justamente ahora no me salen las palabras, tenía un nudo en la garganta y no podía hablar, pasé saliva y por fin pude hablar.- Yo estoy enamorado de ti.- Ella se sorprendió pero después sonrió, no sabía cómo tomarme eso.

- ¿Solo me ibas a decir eso?.- Asentí, sentía mis mejillas arder.- Y-Yo también est-toy enamorada de ti.- Susurró, pero yo lo escuché muy claro.

- _______ ¿Puedo ser tu novio?.- Le pregunte, por Merlín, así no era la pregunta.

Ella rió y habló.- Si, si puedes ser mi novio.

- Lo siento, así no era la pregunta.- Sonreí con vergüenza.

- No importa, fue lindo.-La miré y estaba muy sonrojada.

- No sé nada de relaciones, pero ¿Te puedo besar?.- Le pregunté, ella asintió y nos acercamos.

Puse mi mano derecha en su mejilla y mi mano izquierda la puse en su cintura, ella puso sus manos alrededor de mí cuello y uní nuestros labios.

Era un beso delicado, yo estaba inclinado hacia ella, y eso hizo que mi cabello cayera en su rostro, ella rió en medio del beso y lo puso detrás de mí oreja, los dos sonreímos.

Cuando nos separamos nos miramos a los ojos y sonreímos.

________ es mi novia oficialmente y no podría estar más feliz por eso.