Super amazona (Supercorp)

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Llegaron al D.E.O, Lena y Alura estaban esperándolas para recibirlas en la entrada del balcón. Kara fue la primera en entrar seguida de Diana, Astra y Kripto y unos minutos después apareció Donna detrás de ellas.

Kara y Lena se abrazaron y se quedaron mirando a Astra y a Alura para ver que hacían.

—Hermana. —dijo Astra casi sin voz al verla allí.
—Astra. —se acercaron al mismo tiempo y se abrazaron.

Donna se acercó a Diana para mirar la escena, Diana la vio y sonrió.

—Será mejor que nos marchemos a casa, realmente estoy cansada. —dijo Kara.
—De acuerdo. —dijo Astra sin dejar de mirar a su hermana. —Tienes tantas cosas que contarme.
—Te lo explicaré todo y tú también tienes que contarme todo.
—Hecho. —sonrió.

Se despidieron de todos y la familia se marchó volando. Astra cogió a Alura porque aún no sabía usar sus poderes y Kara cogió a Lena porque quería tenerla en brazos.

Kara y Lena aterrizaron en el callejón, Kara se puso las gafas y después entraron en el edificio. Las demás esperaban flotando delante de la ventana que estaba cerrada.

Lena abrió la ventana rápidamente y las demás entraron, entonces Kara se acordó de la maleta de su madre y se marchó con su super velocidad a la nave de la Legión para recogerla, en cuestión de segundos estaba en el salón con la maleta y la dejó en el suelo.

Diana, Donna y Astra se cambiaron de ropa y se sentaron en el salón, mientras que Lena pedía la comida para todas.

Media hora después, el timbre sonó y Kara usó sus rayos x para ver quién era.

—Puede que sea la comida. —dijo Lena mientras se levantaba del sofá.
—No, es Mon-El y los demás. —dijo Kara.
— ¿Qué hacen aquí? —preguntó Lena con el ceño fruncido.
—No sé. —dijo Kara encogiéndose de hombros.

Lena abrió la puerta y les dejó pasar.

— Sentimos venir sin avisar, es que queríamos despedirnos, nos volvemos a nuestro tiempo. —dijo Mon-El.
—Oooh.
—Ya nos hemos despedido de los demás, pero os fuisteis muy rápido, por eso estamos aquí. —dijo Imra.
—No pasa nada. —dijo Lena.

Se levantaron todas y se acercaron a los Legionarios para despedirse.

—Gracias por todo lo que habéis hecho. —dijo Kara.
—Bueno, tú nos salvaste. —dijo Mon-El.
—Ya, pero habéis hecho mucho más. Mientras vuestra nave se reparaba, me ayudasteis con Reign, además de llevarme a Argo.
—Eso último me sorprendió tanto como a ti.
—Aún así, gracias.
—De nada, por fin he podido hacer lo que no pude cuando estaba aquí.
— ¿Y es? —preguntó Donna.
—Ayudar a Supergirl.
—Lo has hecho.
—Te has vuelto muy fuerte Mon-El, estoy orgullosa. —dijo Astra.
—Gracias maestra.
—Además pone en práctica todas las hazañas de la Casa de El. —dijo Kara y Mon-El se sonrojó.
—En ese caso eres un miembro más de nuestra familia. —dijo Alura.

Kara sonrió y miró el traje de Mon-El.

— ¿Puedo llevarme a tu esposo un rato? —preguntó Kara a Imra.
—Claro, pero ¿Por qué?
—Ya lo verás. —le guiñó un ojo y pidió a Mon-El que la siguiera.

Kara se quitó las gafas y salió por la ventana, Mon-El la siguió y se fueron volando.

— ¿A dónde han ido? —preguntó Brainy.
—No lo sé.

Alura sonrió y miró a su hermana que también sonreía.

Kara y Mon-El llegaron a la Fortaleza de la Soledad, cuando entraron Mon-El se quedó impresionado con el lugar, era la primera vez que iba.