Super amazona (Supercorp)

70

Alura miraba la escena contenta.

— ¿Qué haces aquí? —preguntó Lara al recuperar su voz y miró a su sobrina.
—Pues... —dijo Kara.
—Tiene una misión que cumplir. —dijo Alura.
— ¿Y eso? —miró a su cuñada con el ceño fruncido.

Las dos se acercaron al salón.

—Tu sobrina ha derrotado a la worldkiller de Lillith en la Tierra y está aquí para acabar con el resto de la secta.
— No sabía que quedasen más.
—Estarán escondidas. —dijo Kara.
—Entiendo.

Kara se sentó de nuevo al lado de Lena.

—Hola Lena, no te había visto. —dijo Lara.
—Hola señora Jor-El.
—Llámame Lara.
—De acuerdo.

En ese momento Kara cayó en la cuenta de algo y decidió comentarlo.

—Hace un tiempo me atacó una Piedad negra. —vio sorpresa en su madre y su tía. —Lena me salvó de nuevo. Pero lo que quiero decir es que... soñé con Argo, y estabas tú mamá y papá. Cuando quise volver a la realidad junto a Lena. Vosotros dos cambiasteis la forma de actuar, como supierais que todo era falso. Pero tú estás viva, así que no lo entiendo.
—Bueno hija, la Piedad Negra te sumerge en un sueño de lo que más deseas en el mundo. Tú querías volver a estar en casa y con nosotros. Así se formó el sueño, pero cuando te diste cuenta de la realidad, esas personas actuaron diferente, era tu subconsciente que quería que vieras a tu padre y a mí, reconociendo la realidad. Eso es todo. —explicó Alura.
—Tu padre y tu tío investigaron mucho sobre esa planta, querían saber que era lo que provocaba, entrevistaron a las personas afectadas y cada uno decía una cosa diferente. Esa planta usaba drogas para dormir a su presa para tener mejor facilidad para extraerle la energía. Tú soñaste con Kriptón, Argo y la familia, era tu sueño más deseado, solo que no querías admitirlo. Las drogas te dejaron en un estado comatoso, por eso fue más fácil para tu subconsciente mostrarte eso. —explicó Lara.
—Tiene sentido. Gracias por explicármelo, en ese momento pensé que vuestros espíritus quisieron ayudarme y me llevasteis a ese sueño. Es absurdo ¿verdad?
—Bueno, no lo es en sí. Por todo lo que pasaste, no me extrañaría que pensaras eso. —dijo Alura.
—Pero eso ya forma parte del pasado. Ya tienes la explicación científica, ahora hay que seguir adelante. Tu madre y tu tía están aquí y es real. Tanto Mon-El como yo las estamos viendo. —dijo Lena.
—Tienes razón.
—Por cierto, tuve un niño. —dijo Lara, Kara sonrió feliz.
—Ya lo sabía.
— ¿Cómo?
—En el sueño, había un niño que no conocía de nada, pero llevaba nuestro escudo, después oí a mi padre decir que era mi primo.
—Ooooh, ¿sabes su nombre?
—Kal-El.

Lara y Alura se miraron sorprendidas y después miraron a Kara sin decir nada.

—Creo que las has sorprendido con eso. —dijo Mon-El.
—Puede que fuera una premonición, ese sueño, la presencia de tu primo, Argo, te decía que Argo seguía en pie y que tu primo existía, significaba que tu tía estaba viva. —dijo Lena.
—Mmm, creo que Rao o algún pariente, ha tenido que ver, porque es imposible que yo pudiera saber eso. —dijo Kara.
—Posiblemente.
— ¿Viste a Kal-El de niño en ese sueño? —preguntó Lara recuperando el estado de shock.
—Sí, estaba con mis padres y por lo que recuerdo, me preguntó si lo llevaría al parque y le dije que sí. Cuando estuvimos allí, me pidió que le hablara de las constelaciones.
—Supongo que si os hubierais criado juntos, te vería como su hermana mayor. —dijo Alura.
—Si.
—Ahora Kal-El es todo un hombre, es miembro del Gran Consejo, representa a nuestra familia, está casado y es padre. —dijo Lara.
—La familia crece. —dijo Kara feliz.
—Si.
— No puedo creer que seas abuela, tía.
—Jajaja, yo tampoco la verdad.
— ¿En qué piensas?— preguntó Lena al ver la cara de su novia.
—No sé cómo es que Argo está aquí, y tampoco sé cómo es que mi madre y mi tía han sobrevivido, pero me alegro que estén bien.
—Tu padre y tu tío nos salvaron, dijeron que nos quedásemos en casa que ellos encontrarían el modo de salvarnos. Fueron al subsuelo de la ciudad, abrieron la puerta de acero y pusieron a toda potencia los propulsores. Cogieron un vehículo para hacer lo mismo con Kandor, Argo ya estaba saliendo del planeta cuando explotó. —explicó Alura.
—Se convirtieron en héroes. —dijo Kara.
—Sí, además tuvieron que actuar deprisa, iban a contrarreloj. Cuando tu nave despegó iniciaron su plan. —dijo Alura.
—Entiendo. —Lena puedo ver orgullo en los ojos de su novia. Ahora sabía que su padre y su tío no murieron en vano.