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En una isla en medio del mar Mediterráneo, estaba todo tranquilo y en paz, de repente se oyó un ruido y la tierra tembló.
Todos los habitantes de la isla salieron de sus casas y dejaron todo para ver lo que había sucedió más allá de su ciudad.
Un soldado avisó a la reina y poco después, junto con más personas, cogieron sus caballos y se fueron cabalgando hasta el lugar del accidente.

Cuando llegaron, la reina y su general se acercaron al cráter y vieron una nave.

Cuando llegaron, la reina y su general se acercaron al cráter y vieron una nave

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—Ten cuidado, no sabemos que es

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—Ten cuidado, no sabemos que es. —dijo la general.
—No te preocupes, lo tendré. —dijo la reina.

Se fue acercando lentamente hasta que alcanzó la nave, no podía ver nada del interior, así que la tocó y de repente el cristal se levantó, todo el vapor salió al exterior, miró mejor y visualizó a una niña que estaba inconsciente y herida.

— ¡Es una niña y necesita ayuda! –gritó la reina.

El general bajó con cuidado y ayudó a la reina a sacar a la joven, ordenó a un par de sus soldados que se acercaran para llevársela.

—Llevadla a palacio y avisad a la curandera. —ordenó el general.
—Ordena a unas cuantas para esconder esto, tengo la sensación que será importante para ella. —dijo la reina.
—De acuerdo.

Antes de irse, la reina buscó algo por la cabina, encontró varias cosas que no sabía para que eran, pero sabía que la pequeña lo necesitaría.

Salió de allí con ayuda de las guerreras que le extendieron la mano y después se montó en su caballo y se fue directa a palacio.

La general ordenó al resto de sus guerreras que la ayudaran con la nave y la llevaron a la cueva.

Eran mujeres fuertes, rudas, guerreras. Y su hogar era Themyscira, la isla de las amazonas.

La reina cuando llegó, preguntó donde habían dejado a la joven, la guiaron hasta la habitación, cuando entró vio a la curandera curando la herida de la joven.

— ¿Cómo se encuentra? —preguntó la reina.
—Está bien, pero sigue inconsciente, puede que el golpe fuera muy fuerte. Por suerte la herida de la frente es superficial, pero sangra bastante. —levantó la venda para que la reina lo viera.
—No hay nada. —dijo la reina sorprendida.

La curandera lo miró y efectivamente, no había nada ahí, retiró la venda manchada y miró a la reina igual de sorprendida.

—Sé cura mucho más rápido que la princesa Diana. —dijo la curandera. — ¿Cree que es hija de algún dios?
—No lo creo, pero vino del cielo. —dijo la reina.
—Bueno, será mejor que me retire, aquí no puedo hacer nada más.
—Gracias.

La amazona hizo una reverencia y salió de la habitación. La reina se sentó donde una vez estuvo la curandera y esperó a que la joven despertara. En ese momento recordó los objetos que tenía, los sacó de sus ropas y los dejó en la cama. Vio que uno de esas cosas tenía una luz parpadeante, lo cogió extrañada, porque antes no tenía nada.

Sin querer apretó un botón y apareció una mujer en pequeño, la extrañó muchísimo, jamás había visto algo como eso. Y por lo que le decía su hija cuando la visitaba, el mundo del hombre no tenía esta clase de tecnología.

 Y por lo que le decía su hija cuando la visitaba, el mundo del hombre no tenía esta clase de tecnología

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— ¿Quién eres? —preguntó la reina.
¿Dónde está Kara, donde estamos, quién es usted? —miró a la mujer.

La reina la miró extrañada porque no conocía el idioma.

—Me llamo Hipólita, soy la reina de las amazonas y mi reino es Themyscira. —se presentó.

La mujer pequeña, la miró y entonces buscó en sus sistemas el idioma de esa mujer, cuando lo encontró supo que su pequeña estaba en el planeta Tierra.

Discúlpeme majestad, estaba asustada cuando la vi. Mi nombre es Alura Zor-El y soy la madre de Kara.
— ¿Su madre? —preguntó entre sorprendida y extrañada.
Verá, soy un programa con los conocimientos y las memorias de mi predecesora, la verdadera madre de Kara. Ella y su esposo me crearon para que pudiera guiar a la niña y no se sintiera tan sola y además que sus padres estarían con ella de alguna forma.
—Oh, ¿Qué les pasó? lo pregunto, porque usted parece un programa que tardaron un tiempo en hacer para su hija.
—Es verdad, ellos han muerto. Venimos de una galaxia vecina, no muy lejos de este Sistema Solar. Nuestro planeta se llamaba Kriptón, era un lugar pacifico, donde predominaba nuestra tecnología y nuestra historia. Era un mundo tan hermoso que había mucho turismo, pero también era peligroso. Alura Zor-El era jueza, la más importante del planeta, además de la única, ella encarcelaba a todos los criminales galácticos y no galácticos en una prisión de máxima seguridad lejos de nuestro Sistema Solar, un lugar artificial, creado por mi esposo y su hermano, además de la prisión que también crearon. El padre de Kara, se llamaba Zor-El y era el director del gremio de ciencias. Nuestra tecnología era muy avanzada gracias a él y de sus ideas, siempre con la intención de mejorar a nuestro pueblo. También había un departamento militar, donde mi hermana era General, ellos protegían Kriptón.
Un día, mi esposo investigó el estado de nuestro planeta, porque oíamos como temblaba la Tierra, vivíamos en el cielo protegidos por cúpulas, la tierra había sufrido muchos desastres con los años, por ello el abuelo de mi esposo puso a nuestras ciudades en el cielo.
El descubrió que nuestro mundo estaba por desaparecer, así que teníamos que prepararnos para poner a salvo a nuestra única hija, ella no tenía porque morir, así que él creó la cápsula y entre los dos hicimos este dispositivo. —dejó de hablar y cerró los ojos un segundo. —me he comunicado con la cápsula, parece ser que al explotar el planeta, un pedazo le dio de pleno y la desvió de su rumbo. Acabó en la zona fantasma, no sé cuánto tiempo estuvimos allí. —dijo Alura asustada y preocupada.
—Debió de ser muy duro para ella estar sola rodeada de oscuridad en un lugar tan pequeño. —dijo Hipólita. — ¿Por qué la enviaron aquí?
Queríamos que estuviera lo más lejos posible de nuestro sistema, mi marido que además de científico también era explorador, descubrió que en este Sistema Solar, su sol era muy joven y amarillo, eso ayudaría a nuestra hija. Le daría poderes, bueno en realidad siempre los ha tenido, solo que en nuestro mundo, por nuestro Sol, jamás los experimentamos. La radiación de este Sol, activaran la células kriptonianas de Kara y aparecerán esos poderes.

—Ahora entiendo cómo es que se curó tan rápido. Tenía una herida en la frente y ahora ya no la tiene.
Esa es la curación avanzada, también mostrará poderes como la súper fuerza, la súper velocidad, su visión será perfecta, además que volará. Con el tiempo aparecerán otros poderes como la visión calorífica, aliento helado y visión de rayos X...
—Vaya, impresionante. Señora Zor-El, quiero decirle que donde se encuentra su hija, estará a salvo, nosotras cuidaremos de ella y la entrenaremos para convertirla en amazona, además hablaré con mi hija para que la ayude con sus poderes. Ella tampoco es humana es mitad amazona y mitad diosa, tiene varios poderes, además que algunos son los mismos que los de su hija. Kara ya no estará sola nunca más.
Muchas gracias, majestad.

continuará....

Super amazona (Supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora