Super amazona (Supercorp)

55

Ese día decidieron no ir a trabajar, ya que no estaban en condiciones.

Al día siguiente, todas las alarmas del D.E.O sonaron, el tipo que estaba en la enfermería había desaparecido. Winn se encargó de llamar a Kara y a Astra, las necesitaban para encontrarlo, ya que no estaba en ninguna parte del edificio.

Kara salió del laboratorio por la puerta principal y salió del edificio, se escondió en el callejón oscuro y se cambió, emprendió el vuelo y se encontró con su tía.

—Dime como es el sujeto, nunca llegué a verlo. —dijo Astra.
—Pelo corto, algo más alto que yo, complexión atlética.
—Eso no nos dice nada.
—Lo sé, pero es lo único que pude ver cuando lo llevé al D.E.O.
—Separémonos y busquemos por toda la ciudad.
—De acuerdo.

No tuvieron éxito, después de dar vueltas por la ciudad durante horas, decidieron volver al D.E.O.

Lena estaba en su oficina terminando de escribir un e-mail, cuando vio como su pantalla parpadeaba y salía una ligera franja en el centro de la pantalla de otro color. Le pareció extraño, así que se comunicó que su secretaria y se lo comentó, le pidió que llamara a mantenimiento para que lo arreglara.

Jess entró en la oficina sin llamar cinco minutos después.

— ¿Qué sucede?
—Los de mantenimiento no pueden venir, parece ser que todos los ordenadores de la empresa están fallando.
— Mmm, que raro. —dijo Lena mientras pensaba en lo que estaba sucediendo, pero sus pensamientos se vieron interrumpidos por la llegada de Sam. — ¿Qué sucede Sam?
—No me funciona el ordenador y tampoco el móvil, no hay cobertura. — Lena miró su móvil, tenía el mismo problema.

Unos minutos después todo volvió a la normalidad.

—Esto es muy raro. —dijo Lena.

Sam y Jess no le dieron importancia y volvieron al trabajo.

Lena decidió llamar a Kara y contarle lo que les había pasado.

— ¿Cuánto tiempo?
— Unos quince minutos, más o menos. —dijo Lena. — ¿Crees que es un ataque?
—Mmm no, aquí ha pasado lo mismo, pero directamente se han apagado los ordenadores.
— Entonces es posible que haya pasado en toda la ciudad.
—Investigaré.
— Yo también. —se despidió y colgó.

Envió el e-mail y después buscó con la ayuda del satélite donde estaba el problema, sabía que un mal funcionamiento general de la electrónica, quería decir que alguien estaba haciendo algo a gran escala.

En pocos minutos localizó de donde venía la señal de interferencia y le envió las coordenadas a Kara al móvil.

En el D.E.O, seguían desesperados porque el ordenador central no se encendía. Kara recibió el mensaje y vio que Lena le había enviado unas coordenadas. Avisó a su tía para decirle a donde iba y después se marchó.

Llegó al lugar, era un almacén abandonado o casi, había una enorme antena en el techo enfocando al cielo. Aterrizó y entró en el edificio, escuchó dos voces, así que trató de ir despacio para no asustarlos.

— ¿Seguro que se ha enviado? —dijo el sujeto.
—Sí. No es la primera vez que envió mensajes al espacio, aunque en este caso ha sido muy lejos, por ello he necesitado toda la potencia eléctrica de la ciudad. —dijo el otro sujeto, Kara encontró a los responsables.

Estaba cerca de ellos y los vio mirando un ordenador, Kara se fijó que toda aquella instalación era ilegal, había de todo conectado a la pantalla que estaban usando y por detrás había unos cables que iban al techo.

—Espero que lo reciban. —Kara vio al hombre desaparecido.
—Eso no puedo asegurártelo, todo es posible y vengan a buscarte.
—Gracias por ayudarme. Soy nuevo en este planeta, pero he ido a un bar y pedí ayuda, un cliente te recomendó, por eso vine aquí.
—Lo entiendo, pero no le digas a nadie que me has visto y lo que hago aquí, porque, cuando hay alguno de nosotros que desea volver a casa, viene a mí a por ayuda, pero lo que hago es ilegal. La tecnología y la red eléctrica de este planeta son muy primitivas y es posible que alguien se haya dado cuenta de lo que hemos hecho.
—Eso puedo decirte que es cierto, además de que ese "mensaje" ha dejado un residuo para rastrear. —dijo Kara.