Super amazona (Supercorp)

20

Poco después aparecieron los demás.

En ese momento, Lena recibió una llamada preocupante.

— ¿Diga?
—Señorita Luthor, soy Jess, la llamó porque la policía ha ido a L-Corp y han hablado con los de seguridad, ellos me han llamado y he hablado con los policías.
— ¿Qué sucede Jess porque das tantas vueltas?
—Han entrado en su casa, está todo revuelto, la policía no sabe cómo han podido entrar y menos teniendo un portero todo el tiempo. Los ladrones buscaban algo, pero parece ser que no era nada lujoso, porque su ordenador, el televisor y sus joyas seguían ahí. La policía como no tiene su número ha ido a la oficina para que alguien de nosotros se comunicara con usted, quieren saber si tenía algo importante o de valor en casa que no fuera joyas y esas cosas.
—Dios mío, no tenía nada en casa, no llevo trabajo a casa.
—Menos mal, ellos piensan que quizás han hecho todo un montaje en el piso para que creyéramos que habían entrado a robar, y es posible que fueran por algo relacionado con L-Corp, también han dicho a los guardias que estuvieran atentos de cualquier anomalía, creen que sea lo que fuere que buscaran, irán a L-Corp.
—Gracias Jess, espero que te hayan dado sus datos para que pudiera hablar mañana con ellos.
—Por supuesto.
—Buenas noches. —cortó la llamada y suspiró.

Kara y Astra se miraron con el ceño fruncido, Kara se acercó a Lena y la abrazó.

—Bueno, creo que iré con la agente Danvers a su casa, necesita cuidados y yo me encargaré. —dijo Astra mirando a Alex.
— ¿Qué? —preguntó Alex.
—Venga, que debe de estar cansada con todo lo que le ha sucedido, sin contar el calmante que le habrán administrado. —dijo Astra acercándose a ella.
—No entiendo, ¿Qué pasa?
—Alex, creo que vas a tener una enfermera en Astra. —dijo J'onn sonriendo.
—Oh no es necesario de verdad.
—Ya está decidido. —dijo Kara.
—Pero es tu tía...
—Ella es muy buena cuidando a enfermos, cuidaba de mí.
—Venga, vámonos. —la cogió en brazos y se marcharon.
— ¡No, espere! —gritó Alex pero Astra no le hizo caso, salieron volando.
—Ahora tú vienes conmigo. —dijo Kara a Lena.
—Pero...
—No puedes objetar, estarás a salvo conmigo.
—Está bien. —suspiró.
—Yo no entiendo nada de nada. —dijo Diana.
—La llamada de Lena era para informarla de que alguien ha entrado en su casa, así que se quedará conmigo esta noche. —dijo Kara a su madre.
—De acuerdo. Iré a veros mañana y buscaremos al responsable. —dijo Diana con el ceño fruncido.
—Bien. — Kara cogió a Lena en brazos.
—Espera. —se movió para que la bajara, después fue a la mesa de Winn y cogió su tablet y su bolso, volvió con Kara. —ahora sí.

Se fueron a casa de Kara. Entraron por la ventana y la súper heroína dejó a Lena en el suelo, se acercó al sofá y dejó el bolso en la mesa, se quitó la chaqueta y los zapatos y luego se sentó suspirando.

— ¿Estás bien? —preguntó Kara colocándose las gafas para que el traje desapareciera.
—Sí, en Metrópolis jamás entraron en mi casa porque nadie sabía donde vivía. Pero aquí...
— ¿Alguien sabía de tu nueva casa?
—Mi secretaria y el portero del edificio, los trámites de compra lo hicieron mis abogados sin mencionar mi nombre.

Kara fue a la cocina a preparar té para las dos, mientras esperaba que el agua se calentara, se reunió con Lena y se sentó a su lado.

—Puede que alguien te siguiera.
—Nadie sabe que estoy en esta ciudad.
—Pero concediste una entrevista a Catco, así que la gente si lo sabe.
— ¿Pero que ganarían entrando en mi casa? allí no tengo nada de valor.
—Bueno, eres una mujer muy rica, seguro que tienes joyas y eso.
—Sí, pero están en una caja fuerte, y parece ser que no la forzaron, destrozaron todo lo demás, algo buscaban.
—Hoy en día la información es mucho más valioso que las joyas, con ellas es fácil pillar al ladrón.
—No guardo información de mi empresa en casa, no soy tonta. —dijo Lena mirado a Kara.
—Era solo una idea, lo siento.
—No perdóname tú, es que todo esto es muy estresante. —cerró los ojos.

En este momento sonó la tetera, Kara se levantó y fue a la cocina, apagó el fuego y cogió la tetera y sirvió el agua en las dos tazas. Después puso dos bolsitas de té de camomila y volvió al salón, le dio una taza a Lena.

—Gracias. —movió la bolsita por el cordón para darle más sabor al agua y después dio un sorbo.
—Todo irá bien, la policía ya está investigando.
—Es cierto. —en ese momento recordó las cámaras de su apartamento. Dejó la taza en la mesa y acercó su bolso, sacó la tablet y miró los archivos.
— ¿Qué haces? —preguntó Kara.
—En mi apartamento hay cámaras y las grabaciones van a mi ordenador y tablet, así que si miramos el video de esta noche, puede que...
—Descubramos  al "ladrón". —dijo Kara entendiendo.
—Sí. —encontró el archivo y lo abrió, le dio a reproducir y las dos miraron las imágenes.
— ¿Qué es esa cosa? —preguntó Kara sorprendida.
—Lo he visto antes. —dijo Lena, estaba muy seria.
— ¿Dónde?
—Esta noche, en Cadmus, trabaja para mi madre. Winn y yo lo vimos cuando os fuisteis todos a pelear.
—Entonces, tenía razón, era una trampa la pelea contra Non. —dijo Kara.
—Sí.
—Oh Lena, entonces el responsable del allanamiento es...
—Mi madre así que ahora sé que buscaba información de L-Corp y no lo ha encontrado.
—Irá a L-Corp. —dijo Kara.
—Seguro que irá cuando no esté, esta noche no creo que haga nada, al fin de cuentas ha perdido aliados. Pero mañana...
—Mi madre te acompañará a la comisaria, ya que te han pedido que fueras y yo controlaré que tu madre no aparezca.
—No sabes cómo es...
—No importa, estamos en la era de la información, seguro que hay alguna fotografía de ella en internet.
—Sí, cuando mis padres hacían fiestas en la mansión Luthor, habían reporteros, así que seguro que encuentras alguna. —explicó Lena.

Kara notó que Lena no solo estaba cansada físicamente, sino también mentalmente por culpa de su madre.

Kara se llevó las dos tazas a la cocina y acompañó a Lena al dormitorio, después le prestó un pijama y le enseñó donde estaba el cuarto de baño.

—En el cajón hay cepillos de dientes por estrenar, puedes coger el que quieras.
—Gracias Kara.
—De nada. Por cierto en el armario del dormitorio hay toallas limpias, por si quieres ducharte ahora o mañana.
—Lo tendré en cuenta. —sonrió un poco.
—Buenas noches y trata de dormir. No pienses en lo que quiere tu madre, solo piensa que estás a salvo y que tienes aliados poderosos que te protegerán. —Lena no dijo nada, solo asintió y se encerró en la habitación.

Kara suspiró y volvió a la cocina, limpió las dos tazas, y se hizo un poco de sopa, ya que tenía caldo congelado.