Capítulo 26

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Christoph sigue su rumbo de camino a San Francisco. Va caminando por las carreteras pidiendo pon, pero nadie le permite subir. Duerme donde la noche lo tome, muchas veces a la intemperie.

Christoph lleva días sin poder ducharse, casi sin comer y beber. Físicamente está agotado y no ha podido avanzar mucho.

Al pasar por un pequeño riachuelo, él se acerca para bañarse. Se desnuda completamente y entra al agua, mientras se quita el sucio se mira la cicatriz del brazo izquierdo, cuando intentó quitarse el tatuaje del grupo sanguíneo. Mientras se distrae mirando, no se percata que al otro lado hay mujeres lavando ropa. Él al darse cuenta se avergüenza y se tapa con las manos. Ellas comienzan a reírse a carcajadas. Christoph agarra su ropa y se va corriendo avergonzado.

Él llega a una granja en busca de trabajo. Está hablando con un hombre.

—Llevo días pasando hambre... Haré lo que usted me pida y me puede pagar lo que quiera, solo necesito comer

El hombre lo sobre explota trabajando y le paga una miseria. Christoph está unas semanas hasta lograr reunir el dinero suficiente para pagar un viaje en tren.

Deja el trabajo y se va. En el trayecto a la estación es asaltado, perdiendo casi todo su dinero. Con lo poco que tiene le permiten viajar de una estación a otra, yendo en la zona de carga.

Él llega a la próxima estación. Sigue caminando a la vez que busca donde trabajar para comer.

Pasa el tiempo, ya Christoph ha desmejorado físicamente, bajando mucho de peso. Su pelo ha crecido, al igual que su barba. Ha estado robando para poder comer.

En un restaurante luego de robar a la fuerza, es atrapado por los meseros y le dan una golpiza. Lo arrestan y pasa unos días en la cárcel de la estación de la policía. El dueño del restaurante decide no formular cargos y lo dejan en libertad.

Llega a Houston, Texas, viajando en auto. Allí encuentra trabajo en un almacén. Los dueños lo tratan bien, pagándole mayormente con comida y un lugar donde dormir.

Dos semanas después el lugar es arrasado por un tornado de gran categoría. Destruyendo todo a su paso. Los dueños han perdido el almacén y su hogar. Christoph por lástima decide ayudarlos a reconstruir todo, al igual ayudar a los vecinos.

Pasan unos meses en la reconstrucción. Al terminar decide continuar su camino, él va en un camión que se “dirige” a California.

Mientras él descansa no se percata que han cambiado la ruta hacia el sur de Texas, de camino a México. Las personas le hacen bajar del camión y le roban todo. Él se queda desanimado y está varios días vagando cerca de McAllen.

Un día llega a un supermercado. Al sentir tanta hambre se acerca a la zona de carga. Ve a varias personas bajando canastas con diferentes frutos. Christoph sigilosamente se acerca, agarra una fruta y sale corriendo, sin fijarse en el logo del camión donde están haciendo la descarga. Llega a una esquina y cuando está por comer un pequeño niño rubio se le acerca.

—¿Estás robando?... Mi mamá dice que robar es malo, y que a Dios no le gusta

Christoph se asusta y aparta la fruta de su boca.

—Eso no es tuyo, es de mi Tío Tom

—Lo lamento, es que tengo mucha hambre, pero tienes razón, esto no es mío —Le entrega la fruta—

El niño siente lastima al ver su semblante decaído. Le devuelve la fruta.

—Te lo regalo

Christoph sonríe y le agradece. En ese momento alguien silba, el niño se gira y se va. Mientras él come siente unos pasos acercase, del miedo a que lo acusen de estar robando decide salir corriendo. Ya estando lejos deja de correr y se detiene fatigado.

Warrior LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora