Capítulo 66

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En la siguiente batalla para ocupar otro territorio, los alemanes no han hecho el ataque inicial del bombardeo aéreo por falta de aviones disponibles, así que los soldados de Christoph tienen que batallar directamente con los polacos.

Están en un bombardeo terrestre con su artillería tratando de hacer la mayor cantidad de bajas antes de entrar a la zona.

Durante el enfrentamiento Hans está tan deprimido que deja de batallar, queriendo recibir tan solo un disparo para que acabe con su vida de una vez, pero todas las balas pasan a su alrededor matando compañeros y él sigue con vida e ileso.

Hans se enoja y busca un lugar donde esconderse. Se mete debajo de una casa y encuentra mal herido al soldado que lo molestaba. Él extiende su mano pidiendo ayuda y le agarra la chaqueta, mientras que con la otra se hace presión en la hemorragia que tiene en el cuello.

—Jäger, por favor, no me dejes morir

Él lo mira y lo aparta, luego sale del escondite y lo deja solo.

Hans va corriendo, buscando otro lugar y escucha a Christoph hablando por radio. Escucha como pide refuerzo aéreo y se lo conceden ya que los aviones que habían usado en otro ataque están desocupados. Le dicen que en quince minutos llegan al lugar.

Hans se mantiene un poco apartado de la vista de Christoph y trata de calmar la ansiedad que siente por toda la situación.

Sin esperarlo, el lugar donde Hans estaba es atacado por el enemigo al lanzar una bomba. Todo estalla y los soldados que estaban ahí caen al suelo. Algunos mueren y otros quedan aturdidos por la explosión.

Hans agarra su rifle. Se levanta dando tumbos y sangrando por el oído. Escucha un fuerte pitido y siente dolor de cabeza. Cuando comienza a reaccionar un poco y escucha a los soldados vivos gritar pidiendo ayuda. Hans ve a Christoph arrastrándose por el suelo aún aturdido, observa que tiene cortaduras en varias zonas de su cuerpo. Él extiende su mano pidiendo ayuda al verlo de pies.

—Hans... Ayúdame

Hans se le queda mirando unos segundos y escucha voces en su cabeza por toda la ansiedad que está sintiendo.

—No —Se da media vuelta y se va—

—¡Hans! —Christoph le grita en un intento de detenerlo—

Hans se va corriendo, buscando un refugio seguro, llega hasta adentro del bosque y se esconde debajo de las raíces de un enorme árbol. Escucha varias pisadas acercase al lugar así que decide cubrirse con las hojas. Luego escucha varios disparos en todas direcciones, la ansiedad le aumenta y todo su cuerpo tiembla mientras sostiene su rifle.

Está varios minutos escondido hasta que escucha los motores de varios aviones acercarse a toda prisa, seguido de varias detonaciones fuertes. Hans siente como el suelo tiembla en cada explosión.
Poco después escucha la calma. Él decide salir de su escondite y se dirige a ayudar a los soldados heridos.

Mientras Hans lleva a un compañero al hospital provisional, ve a Christoph siendo atendido por un médico. Este lo mira de mala manera. Hans lo ignora y sigue caminando.

Luego cuando Hans va a buscar a otro soldado herido, ve que sacan el cuerpo del soldado que lo molestaba, ya que lo encontraron muerto debajo de una casa. Hans sonríe levemente.

Al día siguiente el General ha llegado y está conversando con los Oficiales a cargo, ya que han montado un campamento provisional en la espera de que recojan a los heridos. En la conversación Hans ve a Christoph hablando con el General y este lo señala varias veces.

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