Capítulo 91

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Ray aprovecha la siguiente parada y se acerca al conductor.

—¿Esta dirección es muy lejos de aquí?

—No... Puedes bajarte en la siguiente parada y es como a 10 minutos de distancia caminando

Ray se queda cerca de la puerta y cuando el autobús se detiene en la próxima parada, él se baja. Mientras camina usa el GPS del celular.

Luego de 10 minutos llega hasta un edificio. Allí comprueba que es la dirección que está en el folleto.

En la puerta ve un letrero de cerrado. Aun así, se acerca y trata de mirar al interior. De momento ve a una mujer venir caminando por el pasillo y se acerca a la puerta. Ella abre y se le queda mirando. Ray ve que es una mujer unos años mayor que él.

—Hola, ¿le puedo ayudar en algo?... Hoy estamos cerrado porque es día de limpieza

Ray se queda sin palabras y titubea.

—Hola, es que yo... me gustaría... yo

—¿Le sucede algo? ¿Necesita ayuda?

—No, no... Quiero saber si esta persona aún sigue con vida —Le enseña la parte de atrás del folleto—

—Si, es mi padre

Ray sonríe sorprendido.

—Me gustaría hablar con él si es posible

—Mi papá es un hombre de edad avanzada...  Por la situación de la pandemia tiene muy restringida las visitas que llegan aquí, al menos que sea por cita

—Yo estoy vacunado y justo ayer me hice la prueba y salí negativo

—Puedo hablar con mi papá, tal vez haga una excepción... ¿Para qué necesita hablar con él?

—Es que sé quién es su padre... Él conoció a mis tres abuelos, pero solo con uno de ellos se hizo amigo y le contó toda su historia

—¿Su historia?

—Si, su pasado

—Nadie sabe de eso, ni mi papá, y menos lo supo su madre

—Pero yo lo tengo... Le juro que es real

La mujer se queda sorprendida y confundida.

—Puedes pasar, te llevaré a su oficina... Hablaré con él y le contaré, de seguro te atenderá

—Gracias

La mujer lo deja pasar y ambos caminan por un pasillo largo. Mientras camina, Ray ve a varias personas limpiando por el lugar.

—Por cierto, me llamo Greta

—Raynald

La mujer le sonríe y lo lleva a una oficina.

—Lo puede esperar aquí... Ahora mismo mi padre está almorzando

—Está bien, esperaré todo el tiempo necesario

Ray se queda solo y se siente muy asombrado con lo que está pasando.

—No lo puedo creer, este mundo es tan pequeño

Él se queda mirando todas las fotos y recortes de noticias que tiene en la oficina. Lo ve en diferentes lugares alrededor del mundo mientras atiende a sus pacientes. Por último, observa el recorte de una revista que le llama la atención. Lo lee en voz alta.

—Hijo de un Nazi, a doctor que salva vidas

Ray sonríe y no sale de su asombro.

Luego de unos minutos esperando, escucha unos pasos acercarse. Ray se levanta de la silla y mira a la puerta. Ve entrar a un hombre mayor, apoyado de un bastón.

Warrior LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora