Warrior Love

Capítulo 82

Al día siguiente, Ray lleva a Jäger hasta la oficina del Capitán, aprovechando que él está ocupado.

—No tardes, puede venir alguien en cualquier momento

—Será rápido

Jäger marca un número de teléfono. Luego de sonar varias veces, pregunta por Elżbieta. Poco después ella contesta.

—Elżbieta... Ich habe nicht viel Zeit

Ray le da un poco de privacidad mientras vigila la entrada. Se voltea y ve a Jäger hablando sorprendido.

Luego de unos minutos Ray regresa y lo escucha hablarle a su hijo.

—Hansy, ich verspreche, ich komme zu dir

Ray escucha a su hijo decirle papá varias veces. Jäger controla las ganas de llorar. Luego Elżbieta le habla de nuevo, pero Jäger aparta el teléfono y habla en otro idioma para que ella no entienda.

—No quisiera que ames a alguien que no sea yo y menos tener que compartir tu corazón con otro hombre... Deseo ser el único en tu vida y que tu sonrisa y amor haya sido para mí solamente, pero sería muy egoísta de mi parte pedirte todo eso... Quiero que vivas feliz junto con nuestro Hans y ambos tengan una nueva vida... Los amo —Jäger engancha la llamada y se seca las lágrimas—

—¿Por qué no se lo dijiste para que entendiera?

—No la quiero ilusionar... Yo nunca regresaré a casa

Ray se entristece.

—Vamos, antes de que alguien llegue

Los dos se van de la oficina, pero Jäger lo hala de la mano y lo lleva hasta una zona apartada. Le habla con los ojos llorosos y la voz entrecortada.

—Prométeme que al terminar todo esto, vas a ir por Hans y Elżbieta

—¿Por qué?

—Quiero que los saques lejos de aquí... Ojalá pudieras llevarlos a Estados Unidos contigo. Sé que allí tendrán mejor futuro que lo que pueda quedar de este país cuando termine la guerra

—Yo no puedo prometerte algo y al final no lo pueda cumplir

—Elżbieta cree que está embarazada nuevamente

Ray se sorprende.

—Desde la última vez que tuvimos relaciones no ha tenido su periodo menstrual... Muy posiblemente voy a ser papá de nuevo y no podré estar ahí para verlo crecer —Se le entrecorta la voz y los ojos se le ponen llorosos— Sé que tú serás un buen padre. No tengo dudas de que serás el mejor cuando regreses a casa... Por eso quiero que mi Hans y este bebé que se está formando, tengan a alguien para seguir sus pasos... Y ese alguien quiero que seas tu... ¿Me lo prometes? —Pone sus manos sobre sus hombros y lo mira a los ojos—

Ray asiente con su cabeza.

—Haré todo lo posible

Ambos siguen caminando y regresan al garaje de la casa donde se han estado escondiendo.

—Falta menos de una hora para el cambio de turno... Diana se está encargando de que tu ruta de escape sea segura, cuando ella regrese será el momento idóneo para salir

Jäger asiente su cabeza varias veces y se queda pensativo.

—¿Qué te pasa?

—Tenías razón, debí decirle que la amo... Debí corresponderle hace mucho, cuando aún estaba a tiempo de largarme de este lugar... Siempre debí decirle a Elżbieta que es la mujer que más me importa en esta vida —Se le entrecorta la voz— Fui un imbecil con ella, cuando solo buscaba darme amor y tener mi corazón... He perdido tanto porque decidí ser un egoísta —Jäger mira a Ray con tristeza— Ela ha sido la única mujer la cual he dejado dominar mi vida... Nunca supe como expresarme y solo la traté mal... Aun así ella logró sacar carácter y mantenerme a sus pies, aun por más rebelde y dominante qué pretendí ser con ella... Siempre evité embarazarla de nuevo porque no la quería condenar trayendo otro hijo mío a este mundo, pero es justo lo que acabo de hacer... Por eso quiero que seas tu quien los busque y los cuide por mi... Te doy dos de mis tesoros, y otro que viene en camino...  Dejó en tus manos a mi mayor debilidad; mi mujer y mi hijo Hansy