the 1 (Jasper Hale)

C h a p t e r 8 2

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ೃೀ• ʚ [ 𝒕𝒉𝒓𝒆𝒆 𝒚𝒆𝒂𝒓𝒔 𝒍𝒂𝒕𝒆𝒓 ] *ૢ✧ ཻུ۪۪⸙͎ ೫'

Tuve ese sueño en donde él estaba haciendo cosas agradables, nuevas y ostentosas, teniendo aventuras por su propia cuenta.

Probablemente ya hubiese conocido mejor a la persona indicada. Quizá ya vivirían juntos.

Hicimos que cada momento contara, sin embargo, los mejores romances se habían terminado. Y no sabía si el nuestro podría entrar en ellos.

Supongo, que nunca se sabe...

Unos pocos días después de graduarme de la universidad había despertado de nuevo sola. Era de esos días en que las preguntas me embargaban con demasía, generándome un montón de curiosidad por saber cómo hubiesen sido las cosas de haberlas manejado diferente.

Saludé a Lisa que preparaba el desayuno con calma. Erik seguro ya se habría ido a trabajar. Su empleo como editor en una editorial lo consumía y al mismo tiempo no. Sus tiempos eran dispares y a penas podíamos verlo.

—¿Conseguiste anoche el boleto a Tailandia? —Curioseé picando uno de los panqueques que me tendió.

—¿Quieres deshacerte de mí ya, Swan? Te estás ganando que no te traiga ningún regalo —jugueteó, terminando de darme unas porciones de frutas tan cuidadosamente picadas que me hizo sonreír ante su meticulosidad.

Los tres debido a la vida "independiente" habíamos tenido que aprender a cocinar. Descubrimos que la vida a base de comida a domicilio es costosa y mala para la salud.

Lisa se iría por unos días a su país natal a visitar a su madre por su cumpleaños. Llevaba dos meses preparando todo. Además, quería ir a festejar con ella el hecho de que al fin se había graduado.

—Es para prepararme a que estaré sola con Erik por dos semanas. No creo poder sobrevivir —dramaticé, tirándome sobre la mesa. Ella soltó una sonora carcajada que me hizo sonrojarme.

—O tal vez sea él el que deba prepararse —jugueteó con una inmensa picardía que ya veía venir— porque seguro vas a aprovechar la casa para ustedes...

—¡Basta, Lisa! ¡No haría algo así! —Chillé, abochornada, pero su miradilla pervertida me hizo todavía acalorarme más de vergüenza—, no ahora. Sabes que he estado muy nerviosa por lo del manuscrito.

—¿Significa que si no fuera por eso sí aprovecharías? —Insistió en sus bromas que me apenaban. Tenía de seguro la cara tan roja que quizá esa era la razón por la que lo hacía.

Antes de que lo preguntes, la respuesta es no. Erik y yo no manteníamos ninguna relación... aún. Estábamos probando suerte viendo y probando que tan bien conectaba nuestra sinergía. Finalmente me sentía lo suficientemente capaz de poder amar de nuevo con todas mis fuerzas y tras mucho pensarlo y mucho dudar, me hallaba en un punto en donde creí que era lo correcto.