Alusión

Cap.3-CONNECTION

El día anterior obligué a Lowell a traerme hasta mi casa ya que parecía muy dispuesto a dejarme varada en la playa.

Esta mañana lo tenía todo planeado. Debía preguntarle a Lance en dónde podía ver esas listas a las cuales Lowell no paraba de llamar estúpidas.

Llegué al instituto más relajada que el día anterior... o al menos eso quería que todos vieran.

Iba camino a mi casillero cuando vi como Jasper venía del otro lado. Estaba solo. Levantó la mirada dándose cuenta de mi presencia. Me dio una de esas hermosas sonrisas y luché para no sonreír como una tonta. Empecé a caminar en su dirección, pero alguien se interpuso en mi camino. Lowell. Me tomó por los hombros y me dio la vuelta. Pasó su brazo por mis hombros y empezó a caminar por el pasillo llevándome con él. Volteé un poco la mirada para ver a Jasper, quien se había quedado parado con el ceño fruncido.

—¿Qué haces?—Reclamé en voz baja.

—La pregunta real aquí es: ¿Qué haces tú?

—Bueno, yo iba a hablar con...

—Estoy seguro de que no es la idea más inteligente que haz tenido.—Se detuvo cuando doblamos el pasillo.

—¿Por qué no?—Crucé mis brazos.

—¿Por qué hablarías con tu ex?

—Pues porque ahora es mi amigo.

—Por favor, eso ni tú te lo crees. No es buena idea que hables con él por ahora. Lo que quieres es superarlo, no caer más a sus pies.

—¿Quién dijo que estoy a sus pies?

—La forma en la que hablas de él.—Enumeró—El como lo miras. Con esperanza. Como si esperaras que en cualquier momento regrese contigo.

—¿Así lo hago ver?—Jadeé.

—Ten compasión de ti misma.

Rodé los ojos.

—Como sea. Solo le iba a preguntar si había visto a Lance. Es su mejor amigo.

—Por supuesto.

—Deja el sarcasmo, bad boy.—Le di una leve palmada en el abdomen.

—¿Bad boy?—Levantó una ceja.

—Te vistes como los chicos malos de las películas.—Sonreí—Con tu cabello despeinado, tu piercing. Y todo de negro.

—Me mantengo preparado por si alguien muere y debo ir al funeral.

—Que feo eres—Recriminé. Él simplemente se encogió de hombros.—Ayudame a buscarlo.

—¿A quién?

—A Lance.

—No creo que solo haya un Lance en todo el instituto.

—Bueno, Lance Blanche. Es el capitán del equipo de futbol. Imposible que no sepas quien es.

—Tú te haces llamar la número dos de «La lista de las chicas más bonitas» del instituto y yo no te conocía hasta ayer.

—Agh, cállate.—Lo tomé de la playera y de esa manera lo jalé por el pasillo.—Si lo ves me avisas.

—¿No crees que sería mejor idea ir a clases? No lo digo por mi, pero tú pareces ser una nerd.

Demonios. Era cierto. Debía ir a clases ¿Cómo se me había olvidado algo tan importante? Solté a Lowell e inmediatamente me dirigí a mi casillero.

—¡Espérame en el receso!—Le grité en medio pasillo.

Salí del aula sintiéndome ansiosa ¿Dónde rayos estaba Lowell? Llevaba buscándolo treinta segundos y él no aparecía. Anduve por los pasillos sintiéndome observada, miré a todos lados encontrándome con Lance. Justo a quien buscaba. Me dio una sonrisa. Crucé el pasillo hasta llegar a su lado.