𝕺𝖒𝖓𝖎𝖘𝖈𝖎𝖊𝖓𝖙𝖊—La chica es fuerte. ¿Como piensas vencerla?— el Capitan Rogers cuestionó con una ceja alzada.
Aún los recuerdos rotos de la rusa se mostraban por los aires gracias al poderoso hechizo que le había lanzado. Era un poco más difícil de controlarlos, ya que la rusa ya se encontraba despierta, pero aún así, el subconsciente de Verse no era el único que se encontraba allí.
—Que estúpida pregunta Rogers.— Venus murmuró con la mirada fija en la neblina roja.
—¿Por que? Ella no parece ser blanda, por lo que he visto.— Hydra hizo una mueca.
—Todo el mundo es blando, hasta tu. Tengo que encontrar su punto débil, no será difícil. Esta chica tiene serios problemas en su mente.— la castaña murmuró con arrogancia y total seguridad.
—Si eres tan poderosa como dices... ¿Por que no solo la controlas? Eres una bruja, controlas mentes o una mierda parecida.— Rogers quiso molestarla un poco.
—Podría, pero hay algo en ella que me llama la atención. Controlándola puedo conseguir muchas cosas, pero no todas.— sonrió de costado y dejó de prestar atención al recuerdo que estaba por los aires y miró al rubio.
—Soy yo. Somos la misma persona, no será muy difícil descifrar lo que esconde.— relamió sus labios y se acercó a él lentamente.
—Como cambian las cosas. Tu, eres otra persona en otro mundo, con poderes que no se asemejan en nada a los tuyos. ¿Y yo? Una marioneta para el gobierno.— Hydra dijo, claramente refiriéndose a Steve Rogers, al que todo mundo conocía, el único, hasta ahora.
—No debes preocuparte por eso. Ese Capitán está muerto.— Venus se encogió de hombros mientras se sentaba a su lado. —Contéstame algo.—
—Hmm, lo que quieras.— Steve arrastró las palabras y se acercó aún más a ella.
—Si estás en contra de que Barnes y yo nos larguemos de este lugar, ¿porque estás aquí? Puedes matarme en cualquier momento.— sus ojos azules miraron fijamente al rubio a su lado.
Hydra se quedó callado unos momentos, tomó un mechón rojizo que caía sobre su mejilla, lo escondió detrás de su oreja para ver mejor su hermoso pero aterrador rostro. Suspiró pesadamente.
—Supongo que te quiero tener cerca. Si dejo que te escapes con Barnes, estoy seguro de que no te volveré a ver, y si te mato... sería lo mismo.— murmuró mientras su grande y cálida mano se colocaba sobre su nuca, acariciando su piel.
—¿Alguna razón por la que me quiera cerca, Capitan?— Venus cuestionó con ironía.
Hydra sonrió al ver el ya familiar gesto que ella hacía al hablar con ese tono y se acercó a ella para comenzar a besar su cuello con suavidad, algo que el no solía hacer. Solo era así con ella.
Venus suspiró y se mantuvo totalmente seria.
—Hay una muy buena razón...— su voz ronca llamó su atención. Sus besos llegaron a su oreja y sus dientes atraparon su lóbulo con cuidado de no lastimarla. —Porque te amo, Venus. Por eso.— dijo sin rodeos y siguió besando su cuello con libertad. Soltó una risita al no escuchar una respuesta por parte de la chica.
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𝐌𝐔𝐋𝐓𝐈𝐕𝐄𝐑𝐒𝐄 | TBY II
أدب الهواة𝐔𝐧 𝐮𝐧𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐨 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞 𝐩𝐚𝐬𝐚𝐫, 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐚𝐬 𝐥𝐚𝐬 𝐫𝐞𝐚𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞𝐧 𝐬𝐞𝐫 𝐩𝐨𝐬𝐢𝐛𝐥𝐞𝐬. 𝐃𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐚𝐥 𝐪𝐮𝐞 𝐜𝐫𝐞𝐢𝐚𝐬 𝐞𝐥 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐝𝐞 𝐭𝐮 𝐯𝐢𝐝𝐚, 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐞 𝐬𝐞𝐫 𝐭𝐮 𝐩�...