𝐌𝐔𝐋𝐓𝐈𝐕𝐄𝐑𝐒𝐄 | TBY II

50 ━━ CREEP.

𝕺𝖒𝖓𝖎𝖘𝖈𝖎𝖊𝖓𝖙𝖊

La amable enfermera colocó los sueros correspondientes que se encargaban de alimentar a la rusa que seguía profundamente dormida en aquella camilla.

—Hace unas horas se movió un poco, ¿Es normal?— Barnes preguntó con preocupación.

—Por supuesto. Básicamente está dormida y es normal que se mueva entre sueños. Y con suerte, no falta mucho para que despierte.— le respondió con una sonrisa.

Bucky le devolvió el gesto y asintió.

—¿Despertará con secuelas?— esta vez Stefan preguntó con interés.

—Hmm... es probable, solo físicas. No presentó daños graves internos. Así que, puede que despierte algo adolorida.—

La enfermera salió de la habitación y ambos volvieron a quedarse solos con Verse.

—¿Que piensas hacer con el hombre que le hizo esto?— Stefan elevó una ceja mientras se levantaba de su asiento.

—¿Por que preguntas eso?— James pareció exaltarse.

—Solo digo. Pareces muy... sobre protector con ella.—

—¿Sabes que? Lo soy, y respondiendo a tu pregunta. Lo mataré.— sonrió sin gracia. —Juré con mi vida que nadie le tocaría un cabello mientras yo estoy aquí.—

—¿Con ese brazo de metal? Por favor, me muero por preguntar... ¿Tiene Spotify incluido?— El ojiazul preguntó con cierta emoción.

—No cruces la línea, Stefan.— James lo miró molesto. —Puede que la hayas traído aquí, pero aún tengo mis dudas contigo.—

—Tu y tú novia son tan aburridos.— el ojiazul rodo los ojos.

Barnes estaba por contestarle, pero la puerta de la habitación se abrió nuevamente.

—Oh...— Mónica frunció el ceño al ver a ambos hombres estando juntos, sin pelear ni nada por el estilo. —Hola.— saludó.

Barnes le sonrió ligeramente.

—Hay un par de personas que quieren verlos...— Mónica sonrió de costado mientras miraba al soldado y a la rusa.

Los hermanos Ivanov entraron a la habitación, Bucky pudo notar como el rostro de la hermana mayor recaía al ver a la rusa postrada en aquella camilla.

—A-Alek, Tiana... ¿Que hacen aquí?— Bucky elevó las cejas con impresión.

—No los habíamos visto en días y vimos lo qué pasó en las noticias, nos asustamos mucho...— Tiana murmuró con preocupación.

—Ah...— Barnes asintió. —Lamento no haberlos llamado antes, como pueden ver...— suspiró con cansancio. —Estamos en problemas.—

Los pelirrojos se miraron entre sí con temor.

Stefan miraba confundido como los hermanos le hablaban al soldado con tanta simpleza, una cosa llegó a la otra en su mente y eso solo logró que abriera los ojos con sorpresa. Rambeau, quien estaba a su lado, lo notó.