𝐌𝐔𝐋𝐓𝐈𝐕𝐄𝐑𝐒𝐄 | TBY II

78 ━━ THANK YOU.

𝕺𝖒𝖓𝖎𝖘𝖈𝖎𝖊𝖓𝖙𝖊

—Hola...— Barnes entró a la habitación, cerrando la puerta detrás de si.

—Hola.— al rusa sonrió con cansancio, extendiendo sus brazos para atraerlo a ella.

Bucky sonrió, para después acercarse a ella, sintiendo como rodeaba su cuello con sus brazos y lo abrazaba con efusividad.

—¿Como estas?— susurró sobre su hombro.

—Pues bien, supongo. Pero prefiero hablar de otra cosa, bésame...— Verse respondió mientras se separaba de él y extendía sus labios.

Bucky soltó una risita y besó sus labios con cariño.

—¿Como están los gemelos?— cuestionó mientras se recostaba sobre su espalda con cansancio.

Verse igualmente se recostó, colocando su cabeza sobre su pecho y abrazándolo a ella.

—Pues bien, supongo. Logre calmarlos un poco después de que los idiotas de los vecinos los molestaran. Como quisiera ser una niña otra vez para darles su merecido...— la rusa maldijo con el ceño fruncido.

Bucky soltó una risita, aunque no estuviera viéndola, sabía exactamente que gestos estaba haciendo.

—No ser una niña no te detiene a darles su merecido y lo sabes.— Barnes sonrió con diversión.

—Tienes razón. Espero poder controlarme si vuelvo a verlos.— Verse suspiró, sacándole otra risita al soldado.

—Me preocupa Tiana.—

—¿Por que?— Bucky se giró al igual que ella, así ambos quedaron recostados, con el detrás de la rusa y su nariz escondida en sus cabellos castaños.

—Siento que se preocupa mucho por Alek y no le da tiempo de pensar en ella. En desahogarse...— Verse sonrió con tristeza, acariciando la mano biónica del soldado que se encontraba abrazándola sobre su estómago.

—Hmm, ¿A quien se parecerá?— Bucky sonrió sobre sus cabellos.

—¿Que quieres decir?— Verse frunció el ceño aunque el no podía verla.

—Otra chica que conozco también se la pasa preocupándose por los demás y no le da tiempo de darse un respiro para ella misma...— su mano biónica dejó su estómago y quitó unos cabellos que cubrían su mejilla para después elevar su rostro y besarla sonoramente.

—Ajá...— Verse rodó los ojos.

—Dale tiempo. Hay que hablar con ambos y hacerles entender que no están solos y pueden hablar con nosotros.— Bucky susurró con suavidad.

—Tienes razón.— la rusa suspiró.

—Ahora, ¿Te volteas y me das un beso?—

—¿Solo uno?— Rickman sonrió con diversión y giró su rostro para mirarlo.

—Los que quieras.— Bucky elevó una ceja.