Desperté, para mi mala suerte otro día más de vida. Me levanté de la cama, lave mi cara, mis dientes y me peiné
Miré la hora y debía ir a desayunar, así que busqué en mi armario algo que ponerme
Me puse una falda, una camiseta corta, una camisa encima y una de cuero, toque personal.
Cuando terminé de vestirme tocaron la puerta. Al abrir vi que era Draco, que al verme quedo embobado
Y yo al verlo con el uniforme de quidditch quedé igual o peor que él. El verde esmeralda le quedaba demasiado bien, se veía realmente hermoso
-Te ves lindo -admití sonriendo
-Vos te ves alucinante -soltó mordiendo su labio inferior y negando con la cabeza -no tenes sentido
Sonreí y mordí el interior de mi labio, me di vuelta para buscar mi grandiosa idea
En mi cajón tenía una imitación de la poción Felix Felicis que me había ganado en la clase.
¿Por qué tenía una imitación? Simple, por si a alguien se le ocurría robarmela, ésta solo tenía jugo, pero se veía idéntica.
Saqué la poción del cajón y se la enseñé a Draco
-¿Es broma? -cuestionó sonriendo
-No, es toda tuya -respondí y se la entregué
Él la tomo y lo animé a beber, lo hizo.
-Gracias -emitió cuando termino
-Estoy segura de que vas a ganar, sos el mejor.
-Tengo mi amuleto de la suerte -acarició mi mejilla y dejé un beso en el dorso de su mano
-¿No debes irte ya? -pregunté por el tiempo
-¿Vamos? -cuestionó él, aunque fue más una invitación
Yo asentí y tomó mi mano. Salimos de mi cuarto y fuimos juntos al comedor.
Cuando entramos todos voltearon a vernos y Draco abrazó mi cintura desnuda, sentirlo tocando directamente mi piel me estremeció.
Llegamos a nuestra mesa y ahí estaban los chicos
-Come rápido que casi acaba el desayuno -soltó Pansy preocupada como si fuese mi madre
Asentí riendo y me senté, Draco se sentó junto a mi
-¿Nerviosos por el partido? -le cuestionó Astoria a los chicos
-Debemos ganar -aseguró Blaise frunciendo el ceño
Vaya que eran competitivos..
Yo me dediqué a desayunar mientras ellos hablaban de como destruir a los gryffindor y bla, bla, bla
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Grindelwald
Fanfiction-Más grande que yo, la tierra, ¿y qué crees? ¡La estoy pisando! -¡No podes hacer lo que te venga en gana!- reprendió Me pare frente a él y lo mire directo a los ojos -Observame.