-Más grande que yo, la tierra, ¿y qué crees? ¡La estoy pisando!
-¡No podes hacer lo que te venga en gana!- reprendió
Me pare frente a él y lo mire directo a los ojos
-Observame.
Al llegar al castillo Draco me dió un beso en la mejilla y se fue a bañar, yo me quedé con Astoria y Pansy
-¿Qué se van a poner ésta noche? -cuestionó Pansy
-Aún no sé -respondí, y era cierto. No tenía idea
-Ni yo -respondió Astoria de la misma manera
-Mejor vamos a prepararnos -sugirió Pansy y nosotras asentimos
-Nos vemos en la sala común -gritó Astoria mientras se iba
Pansy tambien se fue a su cuarto, yo al llegar al mío decidí darme una ducha.
Cuándo salí revolví mi armario y luego de buscar un largo rato encontré un lindo vestido color blanco. Me lo probé y me quedaba justo.
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El vestido tenía transparencias pero no demasiadas, me maquille natural y arreglé mi cabello.
Me senté a leer un libro de artes oscuras hasta que se hiciera la hora.
Tocaron la puerta de mi habitación y luego ésta se abrió, era Astoria
-¿Ya nos vamos? -cuestioné y ella quedó boquiabierta al verme
-Te ves realmente sexy -soltó aún sin cerrar la boca y yo me reí
-Vos tampoco te ves mal -respondí sonriendo y admirando su hermoso vestido negro
Ella me sonrió y me levanté de mi asiento, salimos del cuarto y fuimos a la sala común.
Cuando llegamos todos voltearon a vernos y los chicos comenzaron a mirarse entre sí
-Te ves bien -soltó Matheo mirandome de arriba hacía abajo
-Idiota -respondí con molestia
Noté que me seguían mirando y me puso bastante incómoda, busqué la mirada de Draco que tenía su mandíbula tensa, parecía muy molesto
-Dejen de mirarla o juro que los mato antes de llegar -amenazó Draco bastante molesto
Los chicos desviaron la vista, Pansy, Astoria, Blaise, Tom y Matheo se miraron entre sí y Draco se acercó a mi
-Te ves hermosa -susurró en mi oído y yo sonreí
-Andando gente, tratemos de llegar todos vivos -pidió Blaise y los chicos se reían
Caminamos hacía las tres escobas, Draco caminaba junto a mi para que nadie se me acerque
Y eso me gustaba ¿por qué? No lo sé.
Cuando llegamos había poca gente, las mesas eran para ocho personas y todos comenzamos a sentarnos
Blaise, Pansy, Astoria, Matheo, Tom, Draco y yo obviamente nos sentamos juntos, sobraba un lugar que no tardó en ocupar Adrian. Se sentó frente a mi y todos lo miraron como si fuera sapo de otro pozo
