Capítulo 88

1.1K 67 20
                                    

Mientras tanto..

Desperté adolorida en un cuarto oscuro, frio y extenso

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Desperté adolorida en un cuarto oscuro, frio y extenso. Sentía que mi cabeza iba a estallar y mis manos estaban sujetadas por esposas a una pared.

La puerta de lo que parecía ser un cuarto viejo, se abrió dejando ver, nada más ni nada menos, que a Leta Lestrange.

-Bonita forma de cortejarme tienes -ironicé

-Vaya, creí que estarías más asustada -admitió mirando sus uñas

-¿De ti? -reí sarcástica

Ella sonrió y relamió sus dientes con molestia mientras se acercaba a mi.

-No te haré daño, sabes que me gustas demasiado como para dañar uno solo de tus cabellos.

-Dime, ¿obtengo puntos extra si actúo como si me importara?

Ella volteó los ojos.

-¿No puedes dejar de ser una cretina al menos por un momento?

-Vaya, tu me golpeas y me secuestras y la cretina soy yo, eso tiene lógica -rebatí desbordando sarcásmo

La oí maldecir por lo bajo.

-¿Qué pretendes Leta? Si no vas a matarme, ¿a dónde quieres llegar? -indagué con exagerado interés

Ella no respondió a mi pregunta, por la forma en la que jugueteaba con sus manos de forma inconsiente supuse que no lo sabía.

Caminaba en circulos, lo que me indicaba que no había pensado un plan, no sabía que hacer conmigo.

Ella solo pensó en el secuestro.

-Sueltame y tal vez así, logres que no te mate -sugerí

Leta sonrió y me miró a los ojos.

-Mientras yo tenga aire en mis pulmones no saldrás de este cuarto -aseguró

Resolplé y ella dejó la habitación para luego cerrarla con llave.

Lo que me faltaba, ser secuestrada por una loca.

En lo que mi secuestradora me abandonaba, puse a pensar en donde estaría, en qué parte del castillo.

Por lógica en el sexto o séptimo piso, ya que Leta me dejó inconsiente cuando iba a la torre y no pudo pasearse con este bello cuerpo por todo Hogwarts.

Si mi teoría era cierta, estaba cerca de las torres de Gryffindor y Ravenclaw, irónicamente, nadie de allí me buscaría.

Pensé en los chicos.

¿Se habrían dado cuenta de que no estoy? ¿me estarían buscando?

En algún momento Draco se encontraría con Newt, y ambos se preguntarían por mi.

Pero yo no era de las que se quedaban sentadas a esperar que las rescaten, debía escapar sola.

Tiré de las esposas que me apresaban, quería probar su resistencia.

Grindelwald Donde viven las historias. Descúbrelo ahora