Capítulo 59

70 6 0
                                    

Habíamos pasado todos juntos el día visitando la reserva natural, habíamos ido en un barco del resort, habíamos estado viendo los manglares y sus cocodrilos, habíamos podido ver una familia de delfines nadando y jugando. Conseguimos ver también una tortuga y nadamos junto a miles de peces de colores. A los chicos les encantó. Min Ha y Hae Young no abandonaron el barco en toda la mañana... no querían perder su blanco nuclear de piel para la boda... era del mismo tono que el vestido de novia...

Kwang había disfrutado mucho del agua cristalina. Esa zona donde nos habíamos bajado a bañarnos era maravillosa, el agua más azul que había visto en mi vida estaba en ese sitio.

Estábamos bañándonos cuando una sombra importante pasó por debajo de nosotros y Min Ha chilló desde el barco asustándonos a todos. Manuel el capitán de nuestro barco se acercó a popa para ver qué pasaba.

- Señorita de la Vega, naden despacio hacia la escalera, ya sabe cómo actuar – dijo poniendo una mano en el hombro de Min Ha y diciéndole en ingles que no gritara.

- Chicos id nadando despacio a la escalera – les dije y vi como sus expresiones se ponían serias. Jin perdió todo el color de su cara. Jimin se acercó inmediatamente a mí y Kwang también – chicos... a las escaleras ya les urgí cuando vi que Manuel cogía un arpón.

- Vamos – dijo Jimin empujándome delante de él.

Jin, Jhope y JK ya estaban en el barco cuando yo noté un roce en la piel y empujé a los chicos hacia la escalera, Suga subió seguido de Kwang, pero Jimin no consintió subir antes que yo.

Vi como Manuel estaba lanzando anzuelo hacia la otra parte del barco y todos nos asomamos para ver a un precioso tiburón de arrecife que se estaba dando un festín con el cebo.

- Pensé que íbamos a morir – dijo Jin que parecía que empezaba a respirar.

- No seas exagerado – le dije riéndome. Pero todos estaban todavía con el susto en el cuerpo. A mí ya me había pasado más veces, pero era su primera vez.

Después de aquel susto hubo un bajón en los ánimos, pero por suerte había sido al final de la excursión, teníamos que volver al resort que esa tarde íbamos a probarnos vestidos y trajes para que hicieran arreglos a los largo del día de mañana para la boda.

Los chicos querían pasar por la tarde un rato en el gimnasio y habíamos quedado en que por la noche iríamos a la discoteca, ya que al final la noche anterior no nos habiamos animado a ir. Aunque yo tenía pensado pasar después de las pruebas de los vestidos para practicar un poco de pole, hacia meses que no lo hacía y no me había dado cuenta de que lo echaba de menos hasta que ayer me subí a la barra. Era divertido, sexy y gratificante, nada mejor que sentirse empoderada y aquel deporte era perfecto para eso. 

Encontré una EstrellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora