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Narra Leila.

Al entrar un montón de caras desconocidas y alguna que otra que me sonaban de la fiesta anterior se acercaron a saludarnos y Thomas no se quedaba a hablar con ellos. Subimos por unas escaleras enormes hasta una sala donde había una mesa grande rodeada de sillas con matices dorados en el centro, y como doce o diez personas hablando en un rincón, las cuales nos miraron nada más oír la puerta abrirse.

-Vaya, Thomas, ¿quién es esta belleza que te acompaña? -Dijo un chico rubio con los ojos castaños mientras me cogía la mano y la besaba fingiendo una reverencia.

-Mi novia, Peter, y más te vale alejarte de ella. -Dijo Thomas solatando una carcajada y estrechándole la mano.

Saludamos a todos los de la sala y Thomas me dejó con un grupo de chicas que parecían ser sus primas o algo por el estilo mientras él hablaba con su madre.

-Leila, estamos encantadas de que hayas podido acompañarnos hoy, nos ha hablado de ti Victoria y teníamos muchas ganas de conocerte. -Dijo una pelirroja de ojos verdes mientras daba largos tragos a su bebida.

-Bueno, en realidad, el placer es mío. -Dije con una sonrisa.

Siguieron hablando de demasiadas cosas sin importancia y lo único que quería es que Thomas vienese a sacarme de ahí hasta que las oí hablar sobre el hermano de una de ellas y decidí preguntar por los hermanos de Thomas.

-Thomas tiene un hermano, que se supone que debería estar ya aquí, pero como siempre, llega tarde. -Dijo una de ellas.

-¿Y hermanas? -Dije mientras cogía una copa.

-Que va, Thomas no tiene hermanas, es decir tuvo una hermana gemela, pero murió en el parto, así que no cuenta. -Respondió la pelirroja.

-Ah, vaya, que pena. -Dije con desdén.

Seguimos hablando hasta que todos se reunieron en la mesa y Thomas me indicó que me sentara a su lado.

Durante la comida todos hablaban de los logros que habían conseguido o de lo bien pagados que eran y demás estupideces y Thomas me miraba divertido y de vez en cuando ponía su mano sobre mi pierna y me miraba a los ojos.

-Bueno Leila, ¿y tú en qué trabajas o qué tienes pensado hacer?

Preguntó su madre.

-Ella no tiene que preocuparse por trabajar, porque no tiene que hacerlo, cuando nos casemos seré yo el que lleve todos los gastos y demás, no quiero que se preocupe por esas tonterías, ya tendrá bastante trabajo cuando lleguen los niños. -Dijo Thomas y de repente todos los ojos se pusieron en él, incluso los míos.

-Ah... Thomas, primero, esa respuesta es lo más degradante que he oído en mi vida y tengo pensado hacer filología inglesa o diseño, y lo siento, pero no pienso tener hijos, ahora si me disculpáis. -Dije quitando la mano de Thomas sobre mi pierna y saliendo de ahí mientras algunas miradas de desaprobación y otras de aprobación me seguían hasta la puerta.

//por ti, por mí// matty healyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora