//por ti, por mí// matty healy

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Tropezé contra el bordillo de la acera, me levanté y seguí corriendo, entré en el cementerio, la puerta estaba abierta, así que la cerré detrás de mí bloqueándola con un par de piedras.

Caminé con las piernas pesadas hasta la fuente, pero no había nadie. Volví la vista hacia la parte sur del cementerio, buscando alguna parte en la que poder esconderme, caminé hasta llegar a una lápida dejándome caer detrás de ella, intentando calmar mi pulso.

Mi mente estaba hecha un desastre, así que, convencida de que Jack no me seguía me dispuse a ordenar mis pensamientos mientras mi pulso se tranquilizaba y recobraba poco a poco el aire.
Matty... Alex... Quienquiera que fuera, me había engañado, todo este tiempo, pero, él afirmaba quererme, Jack me quería muerta o quería algo de información acerca de dónde se encontraba y Thomas cada día era un poco más distinto, de momento, me encontraba a salvo con él, o eso quería creer, Matty... ¿Por qué he vuelto?, ¿de verdad creía que estaría aquí?, y si estuviese, ¿me protegería?, no, no, por su puesto que no lo haría, Jack es su compañero, sólo dios sabe la de crímenes que habrán ideado juntos... Pero algo en su voz me decía que no me mentía, que me quería... Yo... Por mi parte, puede que también sintiese algo por él, pero no tenía ninguna oportunidad de florecer, y mucho menos después de saber que me había utilizado... Gilipollas, no, yo era la gilipollas, por haber confiado en él, por haber creído que de verdad alguien huiría conmigo, que de verdad alguien me querría, que por un momento, alguien se preocupaba por mi...
De todas formas no le necesitaba, me tenía a mí misma, y eso debía bastarme.

Seguí con la mirada perdida cuando el sonido de puertas abriéndose se escuchó a lo lejos, comenzó a llover, una ligéra lluvia que levantaba una enorme niebla, "Alice, se buena y sal de donde quiera que estés, no voy a hacerte daño." oí a Jack gritar con una pizca de malicia en su voz, traté de moverme, pero, tenía un arma, si me movía me dispararía.
"Alice", oí que la voz se acercaba.