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Narra Alex.

Aparcamos el coche y caminé sin rumbo por unos minutos hasta que la vi en la distancia.

Me habían disparado dos veces antes, me habían dado palizas, me habían roto el corazón, pero nunca nada antes me había dolido tanto como verla ahora. Llevaba un vestido azul, y tenía el pelo más largo, aparentaba tener más edad, pero seguía teniendo la misma carita de niña buena, iba en tacones y parecía más alta de lo que recordaba, él, él estaba a su lado, estaban cogidos de la mano, la abrió la puerta del coche y ella le besó en la mejilla sin dejar de reír, sus risas me destrozaban por dentro, ver que era feliz con él me destrozaba aún más. Hacían la pareja perfecta, era la vida que se merecía, pero era lo suficientemente egoísta como para no dejarla ir, quería que estuviese a mi lado, y no con él. Pero parecía tan feliz que me destrozaba, joder, la quería y ahora ella quería a otro. Era mía y la dejé ir y ahora está con él. Quiero que vuelva a ser mía, la echo de menos, echo de menos el olor de su pelo, echo de menos mirarla a los ojos y que nuestras almas se conecten como antes. Joder, ¿qué he hecho?, la echo de menos, joder.

Las lágrimas caen de mis ojos sin parar, no me di cuenta de que estaba arrodillado en el suelo, intento levantarme pero tengo un dolor intenso y horrible en el pecho que no me deja hacerlo, me siento y meto la cabeza entre mis manos y las lágrimas aumentan, la he perdido, y ahora, ¿qué hago?

No sé cuándo se olvida a alguien...

//por ti, por mí// matty healyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora