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—No seas así ven—lo jalo.

—Te dije que no quiero!—trato de levantarse.

—Ven—lo jalo de nuevo muy brusco.

—No quiero!

—Pero yo sí así que dame lo quiero!—molesto.

—Sueltame!!.

—Quédate quieto!—le apretó las muñecas.

—Que haces déjame!—intentando quitárselo.

—Solo quiero un cariñito así que me cumples por qué soy tu marido—le beso el cuello.

—Quítate!—grito frustrado.

—Cállate—lo golpeó—si te sigues moviendo te irá peor!!.

—Yo no quiero,no por favor—sin saber que hacer.

—Tú vas a ser mío las veces que yo quiera por qué soy tu esposo así que cierra la boca y cumple con tu papel!!—volvió a besarle el cuello.

—Por favor Sueltame!!

—Que te calles—le pego de nuevo sacandole sangre—quieres que te vuelva a pegar ah!!.

—No por favor ya no—llorando.

—Entonces Cállate y no te muevas—le soltó las manos—cuidado con lo que haces—le desabotono su pantalón.

—N-no—cerró los ojos.

—Al final te gustará—saco su miembro para introducircelo.

—Déjame.

—Por algo te casaste conmigo o no Félix?.

—Déjame ya Wooseok!.

—Cierra la boca—le apretó el cuello.

—No!—grito.

Carajo solo fue una maldita pesadilla, te odio maldito Wooseok tanto que si pudiera matarte de nuevo lo haría mucho peor de lo que sufriste antes, espero te estés prodiendo en lo más profundo de tu maldito ajujero

El peligris se levantó de su cama para salir de su habitación,cruzó el pasillo y logró escuchar a Jeonjin hablar supongo que estaba dormido pero claro hablaba solo y no entro ya que sabía que el contrario atacaría y podría lastimarlo aunque estuviera dormido.

Bajo a la cocina por un vaso de agua y ya estando allí se lo sirvió para luego dejar el vaso en su lugar y denuevo subir a su cuarto pero cuando voltio para salir por la puerta de la misma se espanto con la figura del castaño quién se encontraba allí sin hacer ruido alguno y claro su especialidad era asustar a los demás.

—Idiota me asustaste—se tocó el pecho.

—Perdoname pero no puedo dormir...y veo que tú tampoco?.

—No tuve una pesadilla y bueno no fue bonito que digamos.

—Entiendo.

—Pero tú por qué no puedes?.

—Minho me patea mucho—se quejó.

—Solo por eso?—arqueo la ceja.

—No...de echó hay algo que quería decir Lix.

—Dime?.

—Me conoces muy bien y se que ayer me notaste raro con eso de que te vi con el rubio ese.

El Secreto De Lee Félix [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora