Comencé a rebanarme la cabeza pensando en las ocasiones que había descubierto el engaño que orquestaban las gemelas. Habían burlado hasta sus padres pero no a mí.
Pero estos días estuve la mayoría del tiempo al pendiente de las reuniones del consejo, intercediendo por Alysha.
La única forma de salir de la casa sin sospechar era que se hiciera pasar por su hermana, aprovechando un minuto de mi ausencia.
— No te comprendo. ¿Huyó de Frigia por temor a que le pasara algo al bebé? ¡Los Ór-hunter la están cazando! ¿Qué crees que pasará si dan con ella antes que ella encuentre a...el cazador? ¿Crees que les importará que esté embarazada? ¡no debiste ayudarle, lo que hizo fue una locura!
Yo la protegería. Tenía que ir por ella.
Salí a toda prisa de la habitación de Ashley, quién seguía pronunciando palabras que yo ya no le escuchaba. Bajé las escaleras, atravesé la sala y cuando abrí la puerta principal Ashley me agarró por el antebrazo.
— ¡Tyler espérame! —apretó más su agarre— Ella está con John, y está bien.
Me detuve en seco, mis manos se volvieron puños mientras mi cerebro negaba esa posibilidad.
— Repite lo que acabas de decir —mi labio temblaba de ira.
Ashley cerró la puerta tras de mí y se quedó afuera conmigo, dio unos pasos hacía la gravilla de la entrada y yo le seguí.
Entonces noté que vestía como su hermana.
— John está ileso y estaba buscando a Alysha, pero ella temía que John llegara a Frigia lo apresaran y le dieran muerte, así que se fue a su encuentro.
» Están tan unidos que a pesar del inmenso bosque que protege a Frigia, están juntos ahora.
— ¿Cómo puedes estar segura de eso? ella puede estar en peligro allí afuera. No tienes manera de saberlo.
— Claro que la tengo. Es una historia larga, confórmate con saber que ella está bien y está con John —Dio media vuelta y empujó la puerta. Ahora fui yo quien la detuvo.
— Ashley, me vas a decir lo que sabes —la obligué a darse vuelta de un tirón— si en verdad tu hermana te importa. Los Mayores la sentenciaron a cortarle las manos si no se va a casa conmigo. ¿Comprendes la gravedad?
Ella palideció y abrió sus ojos como platos.
— ¡Por Dioniso! Ahora será a mí a la que le harán daño por ayudarla a escapar. Me matarán Tyler, yo no soy importante para ellos, nunca lo he sido y no tendrán piedad conmigo.
Las manos de Ashley temblaban al igual que su labio inferior, sus lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas y no pude evitar sentir pena por ella. En fin, no había hecho otra cosa que proteger a Alysha. Di un paso acercándome a ella y la atraje a mi pecho abrazándola, pero segundos después ella me apartó.
— No necesito de tu lastima. Sabía que algo así pasaría y eso no me detuvo —. Entró azotando la puerta en mi cara.
Solo estaba siendo gentil con ella.
En verdad no la entendía. Sus recientes acciones me tenían desconcertado. Sacudí mi cabeza y me enfoqué en mi siguiente paso: Tenía un tema de conversación pendiente con Mike.
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TOUCH
RomansaTouch es el primer libro de una serie de mi autoría llamada Los hijos del Rey Midas, escrito desde el punto de vista de distintos personajes. Cuenta la historia de una chica favorecida con un fantástico don, guardianes y cazadores a su paso, intriga...