El Demonio A Tus Pies #1

capitulo 20

Cambios...

Celeste.

Estos días han sido estresantes ya que Daren sólo llega y a veces ni eso, pero cuando llega en la noche cae rendido y al otro día se levanta temprano como hoy que antes de salir me despertó con un beso y un abrazo muy apretado donde me decía que me cuidara y no saliera sola de casa.

Es algo extraño viniendo de él.

Como no pude seguir durmiendo espere que saliera de la ducha mientras yo me tomaba una taza de café, cuando sale revisa mi pierna y se asegura que tome mis medicamentos para el dolor en mis pezones, como dice el "Solo lo hago porque quiero volver a lamerlo"

Hoy se cumplen 15 días desde mi secuestro y mis pezones todavía duelen las heridas de la pierna y el hombro ya son mínimas. Los primeros días no dejaba que me tocarán los pezones de tan maltratados que los tenía, pero estos últimos días ya puedo dejar que me revisen un poco aun siento molestia, aunque ya es casi mínima.

Lo sigo al garaje y puedo ver a muchos hombres esperándolo junto a David totalmente armados y todos de negro con chalecos anti balas puesto, veo a Daren como comienza a colocarse sus armas estratégicamente en el cuerpo, también va de negro y para solo ir a unos acuerdos que tiene que asistir va muy bien armado.

Hoy vendrá Mateo a hacerme compañía, lo dudo que Daren y David lleguen témpano más bien lo dudo que lleven hoy, aprovecho de ducharme y bajo a comer algo de Nutella con galletas.

-Señora, su invitado se encuentra en la sala – Informa la mucama que se folla David.

Algunas veces los he escuchado y aunque el muy síndico lo niegue sé que es verdad porque Daren lo confirmó un día que estaba casi dormido y ebrio no le ayudo de mucho ante mis preguntas.

Al llegar a la sala encuentro a Mateo mirando para todos lados sorprendido hasta que sus ojos llegan a mí, hoy se encuentra vestidos con un short celeste y una polera gris junto a unas calcetas del mismo color algo largas para su estilo, pero le quedan bien.

Sonrió y el igual al momento que camina en mi dirección, puede ser que no seamos familia de sangre, pero yo lo considero mi hermano.

-Me da gusto verte bien Goldoni – saluda apretujándome en sus brazos.

-me ahogo – digo con una sonrisa.

-Te aguantas... Te extrañe puerquito – me abraza más fuerte y después de un rato me suelta al darse cuenta que en verdad no podía respirar.

Nos vamos a la cocina para tomar desayuno mientras me pongo al día de todo lo que ha pasado este último tiempo, casi un mes que no nos veíamos, había mucho que contar por los dos.

-un pajarito me contó que ya viven con el... ¿están juntos? – pregunta sin rodeos.

-No sólo vivo con él por ahora – digo unta do los dedos en la Nutella – no tengo como describir la situación, pero cada día que pasa espero que no llegue el momento de irme de aquí.

- ¡Te has enamorado! – Chilla y niego

No me puedo enamorar de él en estos momentos ahora solo necesito concentrarme en la venganza y como despistar a Desmond.

-si lo has hecho, mírate estas colorada y tus ojos brillan con tan solo hablar de él.

-No mentira.

-Ya déjalo así, mejor muéstrame tu nueva casa.

Comienzo mostrándole los dormitorios con sus grandes guardarropas donde queda sorprendido al ver tanta ropa de un solo color y todo ordenado por tallas y colores, típico de Daren por lo que he visto estos días. Con el baño queda anonadado ya que tiene la ducha, jacuzzi un gran espejo.