El Demonio A Tus Pies #1

capítulo 60 ✧ final ✧

" traiciones dolorosas"

Daren

En la mañana me encargo de alimentar al tigre ya que los que dicen ser los dueños están durmiendo y ni un camión los despertaría, cuando vuelvo a la habitación sorprendentemente Celeste ya ha despertado y está mirando a Ian mientras le toca su cabeza.

- ¿No podías dormir? -le pregunto asustándola

-no me dejaron seguir durmiendo, tengo hambre – me dice y ya sé por dónde va todo.

-voy a ver que ahí de comer en la cocina – me sonríe y salgo.

Al llegar a la cocina veo que el maldito tigre esta tratado de salir al patio, abro la puerta y lo dejo salir, comienzo a buscar y encuentro un trozo de torta junto a unas frutillas, las corto y saco la Nutella de la nevera, al llegar nuevamente a la habitación ella me sonríe mientras se sienta en la cama.

-mmm, se ve delicioso – me dice.

-no más que tu – le digo provocando que se sonroje.

-shh, Ian está durmiendo y no quiero despertarlo tuvo una noche muy mala

-el no, tu si tuviste una noche mala – le digo –no paraste de moverte en toda la noche ¿Qué sucede?

-Nada, estaba incomoda – me dice mirando las frutillas – esto duele mucho, ya no quiero seguir caminando solo quiero estar acostada, pero me aburro.

Me gustaría estar estos últimos días con Celeste, pero la Cacatúa no pudo venir antes a molestar, anoche Celeste se sentía muy mal y por eso el baby shower no se hiso, pero si obtuvo bastante obsequios los cuales están aún en la entrada.

Los tres estamos en la mesa esperando a que Ian termine de comer.

Y me refiero a tres porque el tigre se sentó en una silla mirando a Ian mientras comía.

-listo –nos dice –no quelo más, mi pancita ya no ruge como copito.

Celeste está por reír, pero se detiene a ver al tigre que llega a ella refregándose en el vientre.

- ¿Quién es mi bebito regalón? - pregunta ella con ternura.

-yo – dice Ian mientras el tigre sisea en respuesta.

-los dos – dice, me mira y yo alzo las cejas – los tres – dice y sonrió complacido.

Ian va por sus cosas a regañadientes y aprovecho de besar a mi diosa.

-te amo – le digo – llegare en unas horas.

-yo también te amo y no demores por favor, no quiero estar sola – la beso.

No me gusta que piense eso porque ella nos tiene a todos nosotros, aunque piense que está sola no lo está, con ese hermoso corazón que se carga ¿Cómo podría estar sola? Ella es una luciérnaga que brilla a nuestro alrededor iluminando todo con tan solo una sonrisa.

-te amo mami - se despide Ian con un beso y un gigante abrazo.

Se va a despedir del tigre mientras nosotros nos despedimos de beso y luego bajo a su vientre.

-me cuidan a mamá - les digo provocando que se vuelvan locos – los amo con mi vida.

Ian llega y deja un beso en su vientre y salimos, cuando llegamos a la camioneta Ian se calla y no habla más, Llegamos a la casa de la cacatúa y Ian no quiere bajar, hoy Malik se ha quedado con celeste ya que se ha quedado sola en casa si no Ian ya se lo habría traído con el solo para asustar a la cacatúa.