capitulo 46

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"lo siento"

Celeste

¿Tan difícil es querer tener paz y tranquilidad?

Yo soy una persona que no le hace daño a los demás, no ando por la vida jodiendo la vida de nadie, prácticamente vivo en mi mundo.

Pero mi vida es una mierda.

Y ahora me doy cuenta, al estar aquí tirada en el piso con un inmenso dolor en mi vientre y presa del miedo.

No quiero perderlos, ellos son mi vida.

Los necesito, ellos me hacen ser valiente y querer seguir aguantando toda esta mierda porque solo quiero que cuando salgan al mundo ellos estén enterados que su madre nunca se rindió, nunca dejó que sus miedos la vencieran porque tenía que ser fuerte por ellos.

Desmond se mantiene de pie a mi lado mientras trato que no golpee mi vientre ya que con el golpe que me di me duele mucho.

-Esta vez te salvas y ojalá lo pierdas, por tu bien espero que así sea sino un día de estos Te lo saco yo mismo – amenaza.

El dolor que siento en este momento no se cómo describirlo, pero lo único que quiero es que mis hijos estén bien.

- ¡me duele! ¡Duele mucho! – Digo comenzando a llorar.

Estoy desesperada y siento que si me muevo lo empeorar todo.

¡Daren por favor llega!

Desmond se apresura a la salida dejándome tendida en el suelo mientras me sujeto mi vientre tratando de abrazarlo para que mis hijos no estén sintiendo dolor, no el que estoy sintiendo ahora.

Mateo llega a mi lado mirándome con preocupación, revisando todo mi cuerpo con su mirada hasta detener e en mi vientre.

- ¿Estas bien? – Pregunta

-Me... me duele mucho.

-Lo siento mucho mi puerquita – me abraza.

Trata de moverme, pero me duele mucho y lo nota porque comienza a disculparse mientras algunas lágrimas comienzan a caer por sus ojos, decide solo abrazarme y preguntar donde me duele y cosas así que la mayoría ignoro porque solo lloro.

Daren pasa por nuestro lado y se coloca delante de mí para apuntarle a Desmond.

- ¡Russell! – Le grita.

Desmond se gira y Daren descarga el arma en su dirección tirándole al piso.

-Cielo, duele mucho – Le digo para que me mire, cuando lo hace llega a mi lado – No quiero, no quiero.

-Soy una mierda – se reprende – debí quedarme contigo, perdona, por favor perdóname.

No quiero perderlos.

Por favor no a ellos.

No quiero.

- ¡atrápenlo y me lo traen a la de ya! - les grita Daren a los demás.

-No – Le digo a Daren cuando trata de moverme – No quiero, me duele mucho.

-Tengo que llevarte al hospital, no dejaré que les pase nada solo... solo déjame ayudarte – Dice con pesar.

- ¡Celeste! – Gritan los demás cuando notan que solo quedamos nosotros en el lugar.

Llegan corriendo a nuestro lado, pero Daren enfurecido y con sus ojos llenos de lágrimas les apunta.

El Demonio A Tus Pies #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora