El bate y el libro (Colette/Bibi x Lector)

Capitulo 34: Una vida juntos

Lentamente abriste los ojos, pesé a la incómoda situación habías dormido de manera increíble y te sentías muy bien descansado, ¿por qué será?

Te quedaste un momento mirando el techo pensativo y sintiendote muy agusto y cálido, casi se te había olvidado quienes estaban a tu lado y fue cuando te diste cuenta de la situación, ambas seguían profundamente dormidas, Colette estaba abrazandote fuertemente y muy pegada a ti, con su cara prácticamente al lado de la tuya.
Por su parte Bibi igual te abrazaba y agarraba intentando rodear tu cuerpo, cual koala que se agarra a un tronco, sus piernas tenían atrapada una de las tuyas y sus brazos intentaban abrazar lo mas que podían de tu torso sosteniéndose de tu cuello, al menos su cara no estaba tan cerca como la de Colette...

Era algo vergonzoso pero notaste que estaban muy tranquilas y parecían estar durmiendo muy felices, a fin de cuentas mejor no molestarlas y solo aceptar la situación, en un gesto de cariño le diste un beso en la frente a cada una lo cual provocó que se pegaran aun mas a ti y volviste a cerrar los ojos.

DING DONG
Te levantaste sobresaltado, alguien tocaba el timbre, Colette y Bibi se levantaron igualmente con el sonido, muy probablemente por el sueño ignoraron completamente el como estaban dormidas y poco a poco se separaban de ti mientras bostezaban y se tallaban los ojos, no pudiste evitar sentir cierta tristeza pero bueno, eventualmente pasaría, te arreglaste lo que pudiste y fuiste rápido a ver quien era, al ver por la mirilla de la puerta viste que eran los de la mudanza, iban a continuar con su trabajo.

¿Qué hora era? aún parecía de mañana pero seguro que te dormiste por otro rato más. miraste el reloj mas cercano y vaya, eran las 11, tampoco era tarde pero para la hora usual a la que despertabas era llamativo, en fin, abriste la puerta y diste la bienvenida a los trabajadores que siguieron con lo suyo mientras tú volvías al cuarto.
-¿Quién era? -preguntó Bibi sentada a la orilla de la cama tallandose un ojo y con una apariencia que gritaba a todas luces que acababa de despertar.
-Los de la mudanza a continuar con todo... ¿durmieron bien? -dijiste algo preocupado por si acaso no habían tenido tan buena noche como tú.
-Si, demasiado bien... -respondió Bibi en voz baja y con una sonrisa.
Colette no contestó y simplemente abrazo una almohada mientras se reía alegremente aunque de manera algo rara.

-Bueno... estaré con los de la mudanza ayudando, ustedes mientras espabilense. -dijiste antes de salir de la habitación y cerrar la puerta.
El silencio rápidamente se apoderó del lugar, ambas chicas seguían pensando en sus cosas sin hacer mucho más hasta que una de las 2 decidió decir algo.
-¿Y bien? -dijo Colette.
-¿Y bien qué? -respondió Bibi volteando a mirarla extrañada.
-¿Sigues pensando que fue buena idea empezar con esto?
-Pues no sé si iniciarlo por una "competencia" pero no me molesta vivir en el mismo techo que T/N, ni verlo todos los días cada que me levantó... -respondió Bibi intentando esconder la alegría que le causaba esto último, cosa que hizo enfadar un poco a Colette pero continuo.
-¿Sabes? igual me arrepiento un poco el haberlo hecho meramente por eso, pero no puedo negar que en cierta forma me gusta el cambio de lugar, y T/N parece bastante feliz.
-Tiene sentido, vivir en un mejor lugar con sus 2 mejores amigas... pasar de dormir todos los días en un sofá a su propia cama...
-Ojalá hubiéramos compartido la cama todo ese tiempo... -murmuro Colette.
-¿Dijiste algo?
-N-No nada
-En fin, ¿por qué la pregunta?
-No sé, siento que igual exageramos con el tema, genuinamente tengo sentimientos por T/N y lo último que quiero es que alguien me lo quite, pero a su vez tengo que pensar en él, no es nuestro juguete, no sabemos si le agradamos tan bien como creemos y si llevamos esto al límite lo terminaremos alejando de nosotras.
Además, ¿qué pasará al final? algún día tendrá que escoger a una de nosotras.
-Eso si para empezar siquiera escoge a una de nosotras. -pensó de manera pesimista Bibi al racionalizar la situación. -Entiendo lo que quieres decir, pero piénsalo bien, hasta ahora no ha hecho más que ser amable con nosotras, ha hecho muchas cosas por nosotras y siempre nos recuerda lo agradecido que está por todo lo que le hemos ayudado desde que llegó a este mundo, creo de todo corazón que nos considera sus mejores amigas sin dudarlo y nos tiene mucho cariño.
-¿De verdad lo crees?
-Completamente.
-Bueno, de cualquier forma creo que deberíamos calmarnos un poco, nunca te he considerado una gran amiga Bibi, pero tampoco te odio, simplemente tengo genuino miedo de que algún día me quites a T/N...
-Lo... tomare como un cumplido, mira yo tampoco te odio pero a veces te pones muy intenso y admito que estuve algo celosa de que tú fueras la que viviera con él, así que te hago una oferta de paz, dejemos de enojarnos tanto con la otra y hagámoslo como debería ser, sin "sabotearnos" la una a la otra y que sola dependa de nosotras mismas el ganarnos el amor de T/N.

Bibi entonces se acercó a Colette y le extendió la mano en señal de paz y para formalizar el "acuerdo", Colette algo impresionada y perpleja miró un momento a Bibi antes de añadir:
-Me parece bien y creo que también aceptar lo que dije, que da igual a quien escoja T/N lo aceptaremos porque al final él es quien debe decidir y será lo que lo haga mas feliz.
Y así Colette se levantó y estrecho la mano de Bibi, por una vez ambas interactuaban de manera amigable y sin celos o enojos de por medio.
-Hey, que al final del día lo que mas me importa es su bienestar y felicidad.

Y así la situación quedo arreglada, ambas se quedaron quietas un momento, felices aunque algo incómodas y sin saber que hacer ahora hasta que alguien abrió la puerta del cuarto de golpe lo cual asusto a las 2 chicas, eras tú.
-Ah perdón, no quería asustarlas, ¿siguen descansando? ya van a traer por fin los muebles del cuarto y serviría mucho su ayuda. -dijiste asomando la cabeza.
-A-Ah si... ¡claro! ¡en un momento vamos!
Volviste a cerrar la puerta y ambas se apresuraron a cambiarse y prepararse para ayudar que seguían viéndose como si acabarán recién de despertar.

El día pasó con tranquilidad, ayudaban a subir y acomodar los muebles, hablaron y en general pesé a lo cansado de subir y bajar escaleras sin parar fue un día divertido, llegado el atardecer los de la mudanza se retiraron, aun faltaban cosas pero no tan importantes y el lugar ya se veía como un hogar apropiado, sentados en el recién acomodado comedor estaban los 3, admirando el hermoso sol poniéndose y que se veía desde la ventana principal del departamento.
-Wow, no sé si algún día las vistas dejarán de sorprenderme... -dijiste fascinado, hipnotizado por la hermosura del paisaje.
-Es hermoso... ¿al final que te pareció el lugar T/N? -dijo Colette.
-Me encanta, aunque siguen sin decirme el porque de la nada mudarnos los 3 juntos.
Por un momento Bibi y Colette se pusieron nerviosas y se miraron la una a la otra, pero luego de calmarse y pensar un poco sonrieron y te voltearon a ver.
-Es que genuinamente ambas queríamos estar mas cerca de nuestra persona favorita. -dijo Bibi alegremente mientras te daba un pequeño golpe en el brazo.
-Oh, jeje... -te sonrojaste ante la respuesta y pusiste muy feliz, y antes de decir nada te acercaste a Bibi y la abrazaste empujandola lentamente hacia Colette y así abrazarlas a ambas. -Pues me alegra mucho vivir junto a mis 2 personas favoritas en el mundo.
Duraron un buen rato en el cálido abrazo, mas contentos no podían estar, permanecieron así hasta que llego el anochecer