El bate y el libro (Colette/Bibi x Lector)

Capítulo 43: Único

Estabas en taberna de Barley tomando un trago y pasando el rato con otros brawlers luego de una partida.
—¡Hey Barley! ¡otro tarro por favor! —gritó El Primo sentado poniendo un tarro en la mesa junto varias otras igual de vacías.
—Ya es la doceava que te tomas, ¿no deberías parar? —dijo Piper con tono de preocupación y bastante seria. —Además que tanto trabajo va a volver a Barley loco y tú sabes que paso la ultima vez.
—Por favor no me lo recuerdes. —respondió Brock algo asustado.
Estaban todos teniendo un rato agradable, aunque no les hablarás tanto o de manera regular a varios los considerabas amigos y parece que el sentimiento era mutuo.

—¿Y qué tal la temporada? he oído que algunos de ustedes han estado imparables. —preguntó Piper.
—Genial, he sido prácticamente invencible.
—¿Qué? ¿qué no la ultima partida casi la perdemos porque alguien no paraba de darle kills al enemigo? —interrumpió de golpe Pam molesta.
—¡Oh vamos! fue solo darles algo de ventaja para que fuera justo.
—Ok... ¿y qué tal los demás? —dijo Piper esperando que Brock dejará de hablar.
Spike quien también se encontraba en la mesa solo se tapo la cara de decepción mientras recargaba sus brazos en la mesa, aunque no dejaba de sonreír como siempre era evidente que no le iba tan bien.
—A mi me ha ido bien, me he llevado muchos golpes pero con los buenos equipos que me han tocado, he sido muy suertudo... ¡y para mi la suerte cuenta como habilidad también, jajaja! —dijo alegremente El Primo elevando el tarro que recién le trajeron para después tomar un trago. —¡Ah! ¡y si tengo que agradecer a alguien pues quien más que quien mejor me cubre las espaldas que mi buen amigo T/N!
—Oh cierto T/N, tú has estado casi invicto, ¿no? llevas tiempo en esto pero comparado a algunos de nosotros sigues siendo un novato y eso lo hace bastante impresionante.
—Gracias, supongo... si... es solo suerte.
—¡Vamos no seas tan reservado! ¡no recuerdo haberte visto fallar un tiro!
—He fallado varios, pero cuando la mayoría se concentra en quienes se lanzan al frente o estan quietos y delante de mi es fácil.
—Oh si, cuando no dejas vendido a alguien con esa cuerda tuya. —dijo molesto Brock quien ha sido víctima de tu super en numerosas ocasiones.
—Bah, no seas tan llorón, que no aguantes un flechazo luego de que te amarraron como mula es tu problema. —contesto gravemente Jackie quien igual estaba presente y había estado callada hasta entonces. —Aunque no niego que lo de la cuerda llama la atención. ¿donde conseguiste esa ballesta tuya? ¿la creaste tú?

Todos voltearon a mirarte con especial atención, la ballesta aunque no la hubieses creado tú era sin duda una curiosidad llamativa, más cuando recuerdas como fue que la conseguiste.
—Uh, no... me la regaló Jessie cuando empecé a ser un brawler.
Todos voltearon a mirar a Pam la cual asintió con la cabeza y ella añadió.
—Era un prototipo que creamos, pero gastaba mucha energía y era imposible usarla sin estar conectada a un generador o una fuente de energía potente. —Pam se hizo un poco mas adelante y cerró los ojos pensativa. —Jess dijo que cuando T/N la agarró se prendió de la nada y funciono con normalidad, pero solo servía cuando T/N la sostenía.
—¿Alguna idea por qué? —preguntó Piper con especial interés.
—Ni idea, ninguna de las 2 lo podía entender, era imposible ni aunque Nani usará su energía para usarla bastaría y T/N no parece tener alguna energía especial o ser un robot.

Todos parecían interesados en el tema, aunque tampoco parecían empeñados en descubrirlo, tu existencia para los demás siempre había sido fuente de rumores y teorías, todos los brawlers tenían algún trasfondo o historia pero tú no, apareciste de la nada y te volviste un brawler y aunque nadie te lo menciono por pudor, todos sabían de tu primera aparición en este mundo, cuando despertaste de la nada en aquella partida de supervivencia, era imposible meterse o infiltrarse, nadie que no esté registrado lo puede hacer y el sistema suele ser bastante estricto y aun así tú te metiste a una partida de la nada, sin soltar alarmas, nada, una anomalía completa.
Estabas muy metido en tus pensamientos hasta que alguien te lanzó una cuchara que te golpeó en la frente.
—¡Ouch! ¡¿Qué demonios?!
—Lo siento, quería comprobar que no fueras un robot, no quiero que te vuelvas rebelde y nos aniquiles a todos. —dijo Jackie no muy preocupada.
—T/N viejo, siempre me he preguntado de donde vienes, hasta ahora llamabas la atención pero ahora que todo esto sale a la luz, ¡definitivamente necesitamos respuestas! —dijo Brock haciéndose hacía adelante interesado en lo que tenías que decir.
—Pues bueno...
—Sé que no es de mi incumbencia y lamento el atrevimiento pero este tema también captó mi atención señor T/N. —dijo Barley apareciendo de la nada con varias ordenes.
—¡Si amigo! ¿cómo es el lugar de donde vienes?
—Pues...
Spike golpeó la mesa bruscamente con su ahora perturbadora sonrisa, parece que él también exigía respuestas.
—Uh...

Te estabas empezando a agobiar, quizás decirlo en un inicio a Colette y Bibi funcionó pero decir ahora que venías de otro mundo y que no recuerdas nada, que simplemente apareciste de la nada seguramente te haría quedar como un loco. Debías encontrar una excusa o decir algo convincente.
—¿Y bien?
—Es... algo bastante personal...
—¡Vamos hombre dínoslo!
—Ugh, ¿si te digo que soy un alien y vengo del espacio te basta?
—Pues...
Todos se pusieron pensativos y se miraban los unos a los otros analizando tu respuesta.
—No me jodas que se lo creen.
—suspiro Creo que es mejor no importunar mas al señor T/N con el tema, si él no quiere decirlo está en su derecho.
—Gracias, Barley.
—Bueno, ahora si me disculpan.
Barley tomó los tarros vacíos y se fue, el ambiente se calmó y decidiste que era mejor irse antes de que te interrogaran de nuevo.
—Bueno, lamento no ser tan explicativo pero me tengo que ir.

Dejaste tu parte de la cuenta en la mesa y todos se despidieron de ti, saliste del bar y te quedaste un momento parado mirando el cielo y dando un respiro de aire fresco.
—T/N, ¿podemos hablar? —dijo Pam quien también salió de la taberna.
—¿Pam? eh, por supuesto.
Ambos se hicieron a un lado de la taberna y empezaron a hablar.
—Sé que quizás no quieras hablar del tema pero revivir el tema trajo mi atención, lo de la ballesta aun con las pruebas que hicimos no hizo mas que levantar mas dudas y el como apareciste de la nada no hace mas que preguntarme, ¿ocultas algo?
—¿Crees que hice algo malo?
—Para nada pero puedo ver que tú también tienes preguntas respecto al tema y saber que pasó puede permitirme ayudarte.
—suspiro Bien...
Le contaste a Pam todo lo que recordabas y sabías, como despertaste de la nada en la partida, como tenías recuerdos extraños pero inequívocados de otro mundo del que parecías venir.
—¿Y bien?
—Mmm, es mucho que procesar pero luego de lo visto te creo, siento que no hemos hecho las pruebas correctas.
—¿Las pruebas correctas?
—Si, todo lo que hicimos fue pruebas únicamente en la ballesta pero creo que debemos hacerlas específicamente a ti.
—¡¿Eh?!
—Tranquilo, no será nada malo, ¿crees que puedas venir a mi taller mañana?
—Vale, si, puedo hacerlo.
—Perfecto, nos veremos mañana.
Ambos se despidieron, Pam volvió a la taberna y tú empezaste a caminar a casa, todo parecía normal aunque no notaste una presencia que oyó tu conversación con Pam.
—Oh jojojo, esto suena a una muy buena oportunidad... T/N, serás mío.