Capitulo 41: Un día para recordar

429 35 2
                                    

-Y así fue como logré escaparme.
-No lo sé T/N, ¿estás seguro que no lo soñaste?
Estabas charlando con Colette en la sala tranquilamente, se estaban contando anécdotas y lo estabas pasando bien hasta que tu holo-cel te soltó una notificación, al revisarlo viste que te avisaba que en breve tendrías una nueva partida de Brawl Stars.
-Ay dios, se me olvidó completamente, ¡debo prepararme rápido! Oh, ¡me olvide por completo!
-¿Pasa algo?
-Si, tengo partida en poco y se me olvidó completamente.
-Oh, jeje, pues ve rápido.
Corriste a la habitación a prepararte, tomar tu ballesta y ponerte listo, una vez hecho fuiste a despedirte antes de tomar el teletransportador. Saliste de nuevo a la sala y le diste un beso.
-Buena suerte con tu partida querido, jeje.
Y pasaste por la cocina también, ahí estaba Bibi cocinando algo, la tocaste del hombro y le avisaste que irías a jugar una partida, de igual forma te despediste con un beso.
-Ten mucho cuidado amor.
Una vez te despediste fuiste directo a tu partida la cual fue una partida de Supervivencia.

Fue completamente normal, enfrentamientos cada poco, esconderse, estarse moviendo y vigilar los arbustos, al final en el top 3 te enfrentaste contra Belle en un combate a larga distancia entre un montón de arbustos y paredes, luego de muchos intercambios de disparos lograste vencer pero estabas a un toque de morir así que te ocultaste en un arbusto esperando.
-Ufff, solo espero que el último no aparezca pro...
-¡Hola T/N! -gritó Max apareciendo súbitamente atrás de ti.
-¡AHH-!
Poco después volviste a casa por el teletransportador.
-Maldición... bueno un segundo lugar tampoco está mal.
Guardaste tu ballesta y saliste de la habitación para ver a Colette escribiendo en su diario en la sala, al notar tu presencia lo cerró y te volteó a ver.
-¡Hola querido! ¿qué tal te fue?
-Segundo lugar, me agarraron desprevenido y muy herido.
-Ow, bueno, ¡al menos quedaste en segundo lugar!
Te sentaste junto a Colette y ella cuidadosamente te tomó de la cabeza y la acostó en su regazo.
-He tenido una idea. -te dijo Colette con una voz suave mientras te acariciaba y jugaba con tu cabello.
-¿Ah, si? ¿y cuál es?
-Deberíamos tener una cita.
-¿Cómo aquella vez cuando aun vivíamos los 2 en tu casa?
-Si, pero ahora como novios.
-Suena genial. -dijiste con un tono cansado, el regazo de Colette era muy cómodo y estaba empezando a hacer efecto en ti.
-Jeje, pues entonces lo haremos pero de momento creo que alguien quiere dormir.
No pasó mucho tiempo hasta que caíste dormido, eventualmente despertaste y continuaste tu día pero sin duda fue de las mejores siestas que has tenido en bastante tiempo.

Al día siguiente

El sol brillaba con intensidad y tú y Colette estaban preparándose para salir, estabas un poco nervioso tanto por la cita como por tener que explicarle a Bibi qué irías a una cita con Colette.
-Por cierto, ¿y Bibi? -le preguntaste a Colette al buscarla en la casa y no encontrarla.
-Salió con una amiga aparentemente, ¿por?
-

Oh... ¿de casualidad sabe que vamos a una cita?
-No... pero es de esperar, eventualmente puede que tengas una cita con ella.
-¿No tienes problema con eso?
-Solo me concentró en los momentos entre nosotros 2.
-¿Cómo este?
Te acercaste y le diste un beso en la mejilla, ella se sonrojo y te aparto lentamente.
-Jeje, si como ese, ahora fuera que tengo que cambiarme.
-¿No puedo quedarme a mirar?
-No tengo problema pero eso mejor dejémoslo para después, ¿si?
Ella lentamente te siguió empujando fuera de la habitación mientras tú te sonrojaste también, una vez fuera te quedaste esperando en la sala un rato hasta que Colette salió, iba muy bien arreglada y llevaba ropa bastante elegante, te dejo tan impresionado se veía tan hermosa que no podías dejar de verla. Ella tímidamente se acercó a ti y una vez enfrente tuyo se paró y dio un giro lento para mostrarte su ropa.
-¿Y bien? ¿qué opinas...?
-Te ves increíble... -dijiste boquiabierto y sin poder dejar de mirarla.
-Je, muchas gracias querido... en fin. Creo que deberíamos irnos ya.
-Si, vamos.
Ella alzó su mano para que la tomaras lo cual hiciste con alegría y así salieron juntos del lugar.

-¿A donde vamos primero?
-Mmm... tengo una idea
Ella salió corriendo sin soltarte llevandote a la fuerza.
Luego de un pequeño viaje llegaron al parque donde tuvieron su primera cita, no la habías visitado mucho pero la recordabas con cariño. Avanzaron lentamente contemplando el lugar hasta que llegaron a la misma banca junto al lago.
-"Hey mira mamá, ¡una pareja de novios!" ¿lo recuerdas? -te preguntó Colette mientras recostaba su cabeza en tu hombro una vez se sentaron.
-Si, jamás pensé que un día se haría realidad.
-¿No confiabas en tus posibilidades conmigo?
-Bueno aun tenía muchos sentimientos encontrados y aun no procesaba del todo esta nueva vida.
-¿Qué pensabas de mi en ese entonces?
-Bueno, ciertamente te quería y mucho y lo sigo haciendo, aunque creo que aun no me daba cuenta de lo que sentía, me la pasaba tan bien contigo y eras tan amable conmigo.
-Hey, que tú fuiste el que me salvo la vida aquella vez.
-¡No iba a dejarte morir así sin más!
-Seguro que no, y dime... ¿cómo te sientes ahora?
-Pues es difícil describir cuánto te quiero y te amo, lo único que si puedo decir es que al igual que antes... -Te detuviste un momento para voltear a ver a Colette la cual también te volteo a ver y pusiste una mano sobre una de sus mejillas. -Es que me sigues pareciendo tan hermosa como siempre.
Colette se sonrojo notablemente, miró hacía abajo con una gran sonrisa y te dio un beso.
-Siempre sabes que decir.
-Y tú siempre sabes como hacerme feliz.
Estuvieron besándose y abrazándose un rato largo con el sonido del lago de fondo creando un momento sumamente romántico y relajante.

La pasabas tan bien que el día debía de pasar rapidísimo pero de alguna manera los momentos dulces con Colette parecían durar años, deseabas que fueran eternos.
Al llegar la noche estaban caminando de regreso a casa, el día fue increíble, jugaron, comieron e hicieron muchas cosas, todas sin separarse ni por un segundo y unidos como esperarías de una pareja perfecta. Hacía algo de frío y en el cielo se veía una luna llena que iluminaba las calles de una luz blanca que resaltaba mucho el pelo de Colette.
-Hoy me la pase genial T/N.
-Yo también, fue un día increíble.
-¿Sabes? aquel primer día cuando te vi luego de aquella partida, ahí tirado en el cesped, dude bastante si ir a por ti o no.
-Oh cierto, esa fue la primera vez que nos vimos fuera de una partida, recuerdo lo confundido que estaba.
-Me pone nerviosa pensar en un mundo donde decidí mejor no hacer nada y haberme perdido todo lo que eres, todo lo que hemos vivido.
-Honestamente a mi también, ya no solo por quizás no haber sido capaz por mi cuenta si no por no haberte conocido.
-Pero al final lo hicimos, quizás fue cosa del destino.
-Podría ser, si es así debo tener la mejor suerte del mundo.

Llegaron al edificio y antes de entrar Colette se puso al frente tuyo y te miro sonriendo, la luz de la luna reflejaba en su blanco cabello dandole cierto brillo hermoso.
-Bueno, parece que el día acabo, ¿algo más que hacer?
-Solo una cosa, ¿ya te he dicho lo hermosa que eres?
-Jeje... solo unas siete veces por hoy.
-Pues lo vuelvo a decir.
Tocaste y acariciaste un poco su cabello y lentamente se acercaron hasta darse otro beso, uno lento y duradero, una vez separados se sonrieron el uno al otro y entraron al edificio para volver a casa.

Nota de quien escribe: Hola, quiero pedir disculpas por tardar tanto en subir un nuevo capítulo, han surgido muchas situaciones de golpe y apenas he tenido tiempo para escribir, espero ya poder tener mas tiempo ahora o pronto, un saludo.

El bate y el libro (Colette/Bibi x Lector)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora