El bate y el libro (Colette/Bibi x Lector)

Capítulo 26: Un lugar inesperado

Y así fuiste teletransportado de nuevo a casa aunque... no, esta no era la casa de Colette, pero este lugar... ya lo conocías, era...
-silbido ¿Uh? ¡¿T/N?! ¡¿qué haces en mi casa?! -era Bibi saliendo del teletransportador, se encontraba tan sorprendida como tú.
-¡¿Bibi?! y-yo... ¡no sé! se supone que debí haber sido llevado a la casa de Colette pero aparecí aquí...
-Uh... pues no recuerdo que se pudiera alterar el lugar del destino y si lo hubieses hecho habrías tenido que entrar a la arena usando este teletransportador...
-¿No hay manera de que me trajera acá por un error o algo?
-Pues esas cosas son medio tecnología medio magia, parece que detectan cual es tu "hogar", igual y es porque estuviste aquí hace no mucho o... -en ese momento Bibi pareció darse cuenta de algo y paso de tener una mirada pensativa hacía otro lado a mirarte con una sonrisa burlona. -o quizás es que detecto mi casa como tu hogar, jejeje...
-¡¿Uh?! p-pues... ¡quizás fue lo primero! -dijiste algo avergonzado, aunque la segunda posibilidad no parecía tan loca, a fin de cuentas Bibi y Colette eran de momento tus "mejores amigas". -ay... ahora que lo pienso Colette debe estar preocupada, le enviaré un mensaje.
-Está bien, pero si quieres quedarte un rato no tengo ningún problema, es buena oportunidad de pasar el rato.
-Lo pensaré.

Sacaste tu holo-cel y rápidamente le enviaste el mensaje a Colette antes de que se preocupara mas.
"-¿Colette?
-¿T/N? ¡¿Donde estás?! me preocupe mucho cuando no apareciste... no me digas que te dejo de nuevo en medio dela nada.
-No... por alguna razón me llevo a la casa de Bibi, estoy aquí"
Esperabas su respuesta pero en su lugar solo recibiste un "Leído", al parecer no se lo tomo nada bien.
-suspiro Creo que si me tendré que quedar un rato... Que si voy seguro Colette me arranca la cabeza nada mas verme.
-¡Excelente! vamos, hagamos algo divertido que tenemos un rato.
Y así una tarde de juegos con Bibi no planeada empezó, estabas nervioso por Colette y pensando como estaría ahorita, era tu amiga pero no sabías que podía hacer estando enojada y mas si "eras" el responsable, o peor que estuviera triste y quedarte a jugar con Bibi fue una mala idea, de igual forma hiciste lo posible por disfrutar de el tiempo con Bibi, no querías mostrarte preocupado y hacerla sentir mal tampoco.
En un momento Bibi fue al baño y te pusiste a pensar, quizás Colette no se enojo tanto y quizás pronto ya estaría calmada y podrías disculparte, era imposible que se enojara para siempre contigo. Sin embargo tuviste mas dudas cuando Bibi regreso y sono el timbre.
-¿Huh? que raro, nadie me suele visitar y no pedí nada...
Bibi se paró a recibir y por si las dudas la acompañaste y lo que pensabas resulto ser cierto, al abrir estaba Colette, no se veía tan enojada como esperabas pero tampoco se veía estar precisamente contenta.
-¡Colette! que raro nunca me sueles visitar, ¿qué pasa?
-Ah nada, es solo que quería confirmar que T/N de verdad estaba aquí.
-Je... hola... -dijiste tímidamente saludando con la mano.
-Pues si, no sabemos el porque, ambos estábamos igual de confundidos y sorprendidos.
-Ah, ya veo...
-Pero que bueno que viniste, T/N y yo estamos pasando el rato, ¿por qué no te nos unes?
-¿Uh? b-bueno...
-¡Genial!
Y sin decir nada mas Bibi jaló a Colette y cerró la puerta, fueron juntos a la sala y siguieron jugando, solo había un control así que básicamente estaban sentados esperando su turno mientras Bibi jugaba, Colette y tú estaban sentados juntos muy incómodos así que decidiste que era buen momento.
-Eh... perdón si te hice enojar, no sé de verdad que paso, porque termine aquí... -susurraste a Colette.
-E-Está bien, perdón si sobrerreaccione pero de verdad me preocupe por ti...
Fue algo muy bonito de su parte, al final la tarde se hizo noche y aun así no parecía que se iban a ir pronto, estaban mirando ahora una película aun en el sillón.
-¿Pero por qué no se van a la derecha si el otro lado está claramente infestado?
-Porque es una película mija deja de quejarte.
Estaban muy relajados y hasta pidieron pizza para cenar, pero ya era muy tarde.
-Ya casi son las 12 pero aun no me quiero ir... -dijiste cautelosamente pero de manera sincera esperando no enfadar a Colette.
-La verdad yo tampoco... -contestó sorpresivamente Colette.
-Pueden quedarse, de verdad, no tengo problema.
-Muchas gracias Bibi.
-Si, muchas gracias...
Y así la que se convirtió en una pijamada siguió hasta que el sueño termino haciendo caer dormidos a los 3.