Capítulo 49

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—¡Corre! —exclamó Zoe

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—¡Corre! —exclamó Zoe.

—¡Corre perra, corre! —grité yo.

Ambas nos hicimos un ovillo, pegándonos lo más que podíamos, devorábamos las palomitas de maíz para calmar los nervios que sentíamos. La chica de la pantalla corría por su vida, pues el asesino con la cierra eléctrica iba tras ella.

Me duele el estomago.

—Joder que ansiedad —se quejó ella.

—Tranquila, es el personaje principal, nunca mueren, es ley.

—Eso no le quita el suspenso.

Reí ante su comentario. Nos terminamos las palomitas y a como yo lo dije, la chica sobrevivió, siempre lo hacen. La película acabó, ambas soltamos un gran respiro de alivio, lo cierto es que estuvo tenaz.

—Ahora elijo yo —tomó el control remoto.

Torcí mi boca sopesando esa terrible idea.

—Ay no, tu eliges películas horribles.

—abrió la boca indignada— Claro que no, ya verás.

—¿Qué buscaras?

Que no diga romancé, que no diga romancé. Supliqué en mi interior.

—Algo más relajado, que tranquilice mis nervios, una romántica.

—Zoe... —hice un mohín.

—Shhh es mi turno, cállate.

No es que no me gusta el romance, yo amo el romance, soy una romántica empedernida. Pero en estos momentos de mi vida, un romance es lo que menos quiero ver.

La salvó mi celular cuando sonó en una llamada, el nombre de Jace brillaba en la pantalla, tomé un profundo respiro y contesté.

—¿Qué pasa?

—¿Sigues donde te dejé? Sigues donde Zoe ¿cierto? —su pregunta sonó amenazante.

—rodé mis ojos— Que si, no es necesario que me llames cada media hora ¿sabes? No eres mi papá.

No, ni siquiera mi padre me ha llamado tanto, es más, no me ha llamado del todo.

—Te llamaré cada que se me salga de los cojones, porque sé como eres y sé de lo que eres capaz.

—Ah, ahora resulta que me conoces tanto... —solté con veneno.

Lo escuché respirar con cansancio. Puedo imaginar su gesto de fastidio, su mandíbula afilada, imponente pero tensa. Sus puños amenazantes y tatuados cerrándose con fuerza.

—Sabré si haces algo estúpido ¿Ok?

—Ajá como sea, adiós papá.

Le corté la llamada antes de que pudiera decir algo más, no arruinará mi noche. Zoe solo me miraba con las cejas elevadas, pero no dijo nada, volteó a la tv en busca de la siguiente película.

Corrupción Letal Donde viven las historias. Descúbrelo ahora