DAME TU CALOR.....SWEET BABY

Capitulo 35

PABLO

Escucho en silencio esas palabras que siguen hiriendo mi corazón hasta que me incita a olvidar lo que siento por ella, a olvidar que existe, y por tanto a olvidar todo....

Me grita que no lo haga más y sin agregar nada más, luego de darme una mirada débil, me da la espalda, dejándome en total confusión, dirigiéndose a paso rápido, seguramente hacia la oficina de correos.

Agacho la cabeza sin dejar de estar en el atrio de este condominio viendo un continuo ir y venir de gente entrando y saliendo de los apartamentos mientras algunos me miran como si fuera un loco ya que todavía estoy sin mover un solo músculo.

Recuerdo lo que me dijo hace un rato, cuando me dijo que escuchó esa noche hace dos días.

Estaba seguro de que no estaba en casa, a pesar de que había entrado al apartamento completamente borracho y, sin mirar a mi alrededor ni ver si estaba en la cama, llevé a la octava chica de la lista al dormitorio donde pasé una noche de la cual recuerdo poco o nada.

Puse mi mano en mi cara, suspirando, pensando que el verdadero problema soy yo y no ella.

"¡Mi opinión ahora es ... mucho, MUCHO peor que el otro día!" ; "¡Eres un egoísta, un cobarde, un egocéntrico y un playboy barato!" ; Estas palabras son una tortura para mi cerebro y mi corazón.

Realmente fui un tonto al dejarla sola a merced de una niña durante más de una semana.

Le creo con respecto al agotamiento.

Puedes ver la fatiga en su cuerpo en su rostro.

Su piel pálida, sus ojos rojos e hinchados, sus ojeras, su voz ahogada por el dolor y la fatiga.

¡Ella está en estas condiciones solo por mi culpa!

Y como ella me consideraba, como un egoísta, incluso me negué a ir a pagar esa cuenta tanto que como un zombi camina por la calle, aún logrando verla de lejos.

-Marizza... ¡Marizza!

Salgo por la puerta del edificio empezando a correr para bloquearla y obligarla a irse a casa a descansar pero en cuanto noto que se baja de la acera y disminuye el andar en medio de la calle es como si mi voz se ha detenido al ver un coche que salió disparado a todo gas desde la esquina de la calle.

Corrí con todas mis fuerzas en mi cuerpo pero desafortunadamente no estuve lo suficientemente cerca para salvarla y alejarla de la carretera viendo la escena más traumatizante de mi vida: verla rodar sobre el capó del auto y luego volver a su estado inicial.

La vi en el lugar con los ojos completamente cerrados mientras el silbido ensordecedor de los frenos aún resuena en mis oídos.

-MARIZZAAAA !!!!!

Finalmente la voz vuelve a mí y sin esperar nada más me tiro en medio de la calle arrodillándome junto a su cuerpo inconsciente.

-¡MARIZZA! MARIZZA! ¡¡MARIZZA DESPIERTA !! MARIZZA DIOS MIO ABRE ESTOS LOS OJOS !!

Muevo su rostro como si fuera una muñeca abofeteándola suavemente con la esperanza de ver sus iris marrones pero en lugar de ver sus ojos veo a la primera multitud de entrometidos que se esfuerzan por ver qué pasaba mientras el conductor del auto, completamente traumatizado. , se acerca temblando.

-Dios ... mio ... N-n-no la había visto ... ¡¡¡NO QUERÍA !!!

De repente miro hacia arriba, ahora lleno de lágrimas, gritando a sus pulmones para pedir ayuda.

-¡¡PERO QUÉ ESPERAS !! LLAMA A LA AMBULANCIA !!!! DESPUÉS HACES LAS DISCULPAS!!!

Casi gruñendo con los dientes, desahogo toda mi preocupación con este tipo que rápidamente se pone al teléfono con los médicos mientras yo permanezco al lado del cuerpo inmóvil de Marizza sin dejar de acariciar su rostro.

-¡¡Por favor !! ¡¡Por favor despiértate!! ¡No me juegues bromas!

Lo único que me tranquiliza es ver cómo se le eleva el pecho, señal de que todavía respira.

Tomó un vuelo paradójico y espero, rezo de todo corazón que no le haya pasado nada grave.

-¡¡¡MARIZZA !!!

Finalmente escucho el sonido de las sirenas acercándose a la distancia y mirándola a la cara noto que sus lágrimas están húmedas.

¿Estaba llorando ... estaba llorando por mí ...?

Cierro los ojos y ahora siento que mis lágrimas se deslizan por mis mejillas.

Verla inmóvil sin escuchar su voz es un dolor en mi corazón.

-Por favor ... despierta ... YO ... ¡TE AMO!

Cierro los ojos, agacho la cabeza, oyendo finalmente la llegada de la ambulancia de la que se bajan los enfermeros y me llevan para cargar a Marizza en la camilla.

-¿La conoces?- me pregunta uno de los enfermeros

-¡Sí! También estuve presente en el momento del accidente.

-Bueno, súbete a la ambulancia, ¡necesitamos entender lo que pasó!

Asiento con la cabeza y sin mirar con odio más a ese chofer loco y desquiciado, sigo a los enfermeros que cargan rápidamente a Marizza y después de hacer sonar las sirenas nos dirigimos juntos al hospital más cercano.

Continuará...

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Que hago? Les gustaría otro capitulo más?

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