DAME TU CALOR.....SWEET BABY

Capitulo 11

MARIZZA

Para desviar la atención de mi monólogo está el padre de Marcos quien alegremente nos trae a una niña hermosa, tranquila y sonriente en un cómodo cochecito.

-¡Tengo que admitir que se está poniendo pesada! ¡Creo que también para ti, Marizza, es difícil llevarla en brazos! Trate de llevar al menos el cochecito hoy- dice el padre de Marcos riendo

Forzando una sonrisa- He cargado cosas peores .. ¡Pero gracias de todos modos!. En cuanto llame a la camioneta, te avisaré a qué hora llegará para cargar lo necesario.

-Perfecto ... echaré de menos todo esto ... pero lo que me hace feliz es saber que Jazmín estará en buenas manos.

Nos sonríe dulcemente a los dos, devolviéndonos ese gesto, hasta que me entrega a la niña.

-Gracias ...

Pongo mis manos en el cochecito y tomando mi bolso nos dirigimos al auto donde, luego de cargar las maletas en el maletero y matarnos con un estúpido carrito, saludamos de lejos al padre de Marcos que al rato regresa a la casa mientras nos dirigimos a la oficina del abogado.

-¿En qué calle esta ese charlatán?

Poniendo los ojos en blanco- ¿Puedes ponerte serio por un segundo?

-¡Eres muy aburrido!

Ignorandolo- ¡En el siguiente giro a la derecha!- leyendo la hoja -Debería ser un edificio azul.

Suspira y reduce la marcha, ejecuta mis órdenes y tras identificar el único edificio azul aparca el coche y, con el aire ya agotado, vuelve a montar el cochecito de la bebé.

-¡¡¡Te juro que si no se abre lo patearé y haré que termine al lado de la basura !!!

¡Pero quieres calmarte Pablo! ??!? Por favor- ensanchando los ojos- Dios mío, mírate, no has estado ni un día con la niña y ya estás histérico!?!?- me mira  sorprendido- ¿Qué se supone que debo decir?

-¡¡No estás haciendo nada espectacular querida !!- hace una mueca- ¡Me estoy matando con esta cosa! ¡Y, tú que solo tienes a una mocosa en tus brazos!

Arqueando la ceja- ¿Ah, sí? ¡Así que agarras a la bebé en tus brazos ya que el "mocoso" de aquí eres solo tú!

Paso a la pequeña, aunque pesadaba, a los brazos de Pablo, que me mira con expresión más consternada y exhausta que antes mientras trato de estudiar el cochecito, que se abre a los pocos segundos.

-¿Estás bromeando verdad? ¡No sé cómo llevarla!

-¡¡Aquí tienes !!- le  sonriendo satisfecha- ¿Tardó tanto?

-Oye ahora quieres llevártela?? ¡Me estoy rompiendo la espalda!

Le hago un puchero falso- ¡Pobre bebé! ¿Qué pasa? Será que tus "supermúsculos" no pueden soportar el peso de Jazmin?

Pablo mirándome- ¡No sabes cuánto me gustaría que pasara un auto y te golpeara!

Aplaudiendo- ¡¡Qué hermoso ejemplo le das a la niña !! ¡Felicidades!- le digo sarcástica- ¡Deberían darte el premio al mejor padre del año!

Pablo estresado- Tutor… No Padre. Esa palabra no es para mí.

Él mira hacia otro lado, mirando ahora el edificio alto frente a nuestros ojos.

Hay Pablito cómo me gustaría decirte que no te mereces nada ni a nadie bueno ..

¡Eras, eres y seguirás siendo un idiota estúpido!

Suspiro, volviendo a la realidad, finalmente colocando mis manos en las asas del cochecito.

-Pon a la bebé y vámonos. El abogado Prieto está en el quinto piso de este edificio.

Pablo poniéndo a la bebé en el cochecito- ¿Hay al menos ascensor?

-¿Te parece que si?- le di una sonrisa falsa

Unos minutos después

Habia un papel pegado en el ascensor

-¡¡¡Pero perfecto !!! ¡¿¡¿Justo hoy se suponía que el ascensor se iba a romper?!?!- dijo Pablo fastidiado

Resoplando- ¿No hay otros ascensores?

Miro a mi alrededor con la esperanza de visualizar algún otro ascensor, con malos resultados, ¡mientras mis oídos se ven obligados a escuchar las continuas y conmovedoras quejas de Pablo!

-¿Quieres callarte por un momento?- digo agotada- ¡¡Estoy harta de ti hoy !!

-Escuchame una cosita- señalando las escaleras- No pienso subir 5 pisos ¿¿ok ??? ¡Más con un cochecito o un niño lo que sea!

-Uh, ¿qué pasa? ¿Estás tan cansado eh?- digo riendo

-¡No te hagas la graciosa! Ya que te parece tan fácil, ¿por qué no lo haces tú, eh?- dice arqueando la ceja

-Tengo una idea mejor ... - digo cruzando los brazos sobre el pecho- ¿Por qué no imaginas que arriba hay una hermosa chica con poca ropa lista para pasar un momento de pasión con "El hombre más hermoso de Argentina "?

Sonrío con picardía mientras digo estas palabras, haciendo señas con mis manos, con el único propósito de convencerlo de que suba y me ayude con el bebé.

-¿Qué ...?

-Vamos ... sé que te mueres de curiosidad por ver a la Secretaria ... del Abogado ... Mmm ... - finjo pensar- ¿podría ser rubia ... o morena?-  riendome por mis ocurrencias- Y quien sabe que talla lleva de pecho .. ¡Quién sabe!- digo encogiéndome de hombros- Pero está bien .. espérame aquí, subiré y luego te lo diré!

Aparco el cochecito junto a Pablo, aturdida por mis palabras tan envolventes, empiezo a subir los primeros escalones tratando de contener la risa.

Dios mío, qué fácil es engañarlo y cambiar su voluntad nombrando las palabras Mujer y Pecho.

-¡¡Espera !!

En voz baja digo- ¡¡Bingo !!

Lo escucho dándole la espalda hasta que, fingiendo ser seria, vuelvo la mirada para escuchar lo que tiene que decir.

Pablo sonriéndome- Quizás mientras hablas con el abogado ... bueno ella y yo ...- guiñándome un ojo- Bueno, tú me entiendes. Quién sabe ... en el armario o tal vez en el baño.

Me muestra su sonrisa pervertida y al escuchar todas estas palabras en clave me disgusta un poco y me arrepiento de lo que dije hace un rato.

-¿Sabes que realmente me enfermas?

Con despreocupación pronuncio estas palabras que no le afectan y como un relámpago agarra a la niña, poniéndola en sus brazos.

-Dejamos esto aquí. Nadie lo robará.

Acerca el cochecito hacia el ascensor roto y todo alegre comienza a subir las escaleras rápidamente adelantándose, y dejándome inmóvil en los primeros escalones con una expresión de desconcierto.

-¡Sí.! ¡Realmente apestas Pablo Bustamante!

Continuará....

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Espero que les haya gustado el capitulo

Besos

Nos estamos leyendo