Maraton Crucero 12/X

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MARIZZA

Me mira con la esperanza de disuadir mi decisión.

Después de todo es realmente despreciable de mi parte aceptar los coqueteos de Samuel en su presencia, ya que hace unas horas se me declaró.

Levanto la mano suavemente de su agarre y apretando los puños bajo la cabeza lista para tomar la decisión final, pero no tengo tiempo de responder ya que Megan levanta el brazo con elegancia, llamando inmediatamente la atención del camarero.

-Disculpa cariño, ¿podrías sentarnos aquí?- señala la mesa y a pesar de haber hablado con un tono de voz equilibrado, el camarero se nos presenta como un relámpago, sin duda cautivado por su belleza.

-¿Sí? ¿Algún problema?- dice sonriendo

-Bueno, me gustaría preguntarle si puede acercar las mesas ...- acercándose al camarero - Si no es molestia- con voz persuasiva y acariciando su pajarita, convence sin pestañear al camarero que, tartamudeando, se ruboriza, inmediatamente se pone manos a la obra.

-Claro que no .. - riendo nerviosamente- ¡Aquí tienes!

En menos de un minuto se acerca silenciosamente a las mesas, ahora creando una mesa de 4 plazas que entusiasma a Samuel y Megan quienes aplaudiendo y agradeciendo al pobre camarero, aún hipnotizado, se sientan a su lado mientras yo dirijo una expresión de pesar a Pablo. en lugar de eso, me mira.

-Buen trabajo.¡Felicidades!

Estas son las palabras que me susurra cuando pasa a mi lado para sentarse frente a Megan.

Me muerdo el labio maldiciéndome por no interrumpir a Megan a tiempo.

¡Maldita sea, la chica es rápida!

Respiro hondo y tratando de controlar mi agitación me siento junto a Pablo, encontrándome automáticamente frente a Samuel que me guiña un ojo, haciéndome sentir aún más avergonzada.

- ¡Esto sí que fue una verdadera suerte!-
Megan sonriéndole a Pablo- Los 4 juntos. ¿Qué casualidad no crees?- ahora mirándonos a todos

- Sí ... solo una "coincidencia"- digo forzando una mini sonrisa

-Entonces Marizza ... ¿le enseñaste a Pablo el peluche que te di?

Mis ojos se sorprendieron con esta pregunta que me dejó desprevenida cuando sentí la mirada de Pablo posarse en mí.

-¿Peluche?- dice confundido- ¿De qué peluche está hablando?

- El que estaba sosteniendo hace un momento ... - digo mirándolo- ¿Recuerdas?- esta súper nerviosa, quería que la tierra me tragara

-¿Esa subespecie de rana?- dice con expresión de disgusto- ¿Ese horror?

- ¡No es un horror!-
digo pretando los puños debajo de la mesa

-Uh Sam, ¿de verdad ganaste un peluche para Marizza? Es muy tierno de tu parte- dice Megan sonriendo

- A Marizza no le gustan los peluches, para que lo sepan- dice Pablo mirando a Samuel mientras bebia vino

- Pablito, ¿por qué no sigues bebiendo el vino y te coses la boca?- era cierto en mi adolescencia me gustaban pero ya estoy grande para eso y me parece muy cursi. Excepto Coco que aunque Pablo no lo sepa siempre va a estar guardado en el baúl de los recuerdos

- ¿Realmente no te gustan ...? Pensé que te hacía feliz ...- dice Samuel decepcionado

- ¡Por supuesto que me gustan! ¡No lo escuches! Ya sabes ... cuando comienzas a beber, pierdes algo de control de su lengua- digo mintiendo para que no se sienta mal

DAME TU CALOR.....SWEET BABYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora