—Buen día bebito hermoso, campeón de Inglaterra —le dije agarrándole la mano cuando sentí que se estaba levantando de la cama, después de que le haya sonado su despertador.
—Hola —me saludó sonriendo.
—Dame un beso antes de irte a bañar.
Se acercó a besarme así que aproveché para agarrarlo, tan fuerte que terminó cayéndose arriba mío.
—Pará —dijo riéndose.
—Te extrañé ayer, no sé ni a qué hora llegaste.
—Demasiado tarde para mi gusto. Se fueron a la mierda los chicos festejando y no querían que me vaya.
—Y está perfecto. Felicidades de nuevo mi amor —le di un beso mientras él sonreía.— Te amo.
—Gracias. Te amo también.
—¿Hoy me vas a dejar ganar ahora que ya son campeones?
—No —se rió.— Voy a hacer todos los goles que pueda.
—No seas forro —me reí también.— Llegás a hacer algún gol y te rompo todo a la noche —agregué apretándole el culo con las dos manos.
—¿Y eso se supone que tiene que asustarme? Ahora más quiero hacer.
—Qué trola que sos —dije antes de morderle el labio.— Me encanta.
Sonrió y me dio otro beso antes de safarse de mis brazos para ir a bañarse. Yo podría haberlo acompañado, pero preferí quedarme durmiendo diez minutos más.
***
Saludamos a Fernet antes de irnos. Por única vez, como yo tenía que ir también a Manchester, íbamos a viajar juntos.
—Me da pena que se quede solo todos los días. Necesita un hermanito —dijo Juli mientras se ponía en cinturón.
—No podemos cuidar a uno, ¿y querés otro? Estás loco.
—Una negrita, y le ponemos Coca.
Me reí pero no volví a hablar por un ratito, cuando ya estábamos en la ruta.
—¿Hoy hacen fiesta después del partido?
—Sí, seguro. Ayer fue la previa no más. ¿Querés ir? Nos dijeron que podíamos invitar a quien quisiéramos.
—No bebé, gracias. No puedo ir con los jugadores del City a festejar que ganaron una copa en la que el Chelsea también participa. Me va a odiar desde el utilero hasta el dueño del club.
—Es verdad. Extraño que juguemos en el mismo equipo —se quejó. No lo vi, pero me imaginé su carita.
—¿No hay un lugarcito en el City para mí?
Se rió antes de contestarme.
—Mirá, si yo tomara las decisiones te compro ya. Solamente con verte entrenar todos los días se paga tu precio.
—Mejor tenerme en tu cama todos los días transpirando por vos, ¿no?
—Sí, ya sé que me gané la lotería, no hace falta que me lo recuerdes.
—Se hacía el feo —sonreí.— Cosita bien hecha. No te como la boca no más porque tendría que frenar y vamos a llegar tarde.
—Porque no te bañaste conmigo.
—No puedo bañarme con vos y no terminar cogiéndote.
—Capaz que tenía ganas de tener sexo en la ducha.
—No me mientas, si ya sé que no te gusta.
—No lo prefiero —admitió.
Le subí el volumen a la música porque justo estaba sonando la canción que tenía pegada hacía días.
ESTÁS LEYENDO
Desde tu primera sonrisa - Julián y Enzo
FanficSEGUNDA PARTE YA DISPONIBLE! Julián creyó que iba a tener un entrenamiento más hasta que le presentaron al nuevo integrante del equipo: Enzo. A partir de ese día, los dos jugadores de River dibujaron el camino hacia una amistad que se iba a ver com...