I JUST WANNA BE YOURS | Harry James Potter |

THE PROPOSAL

Julio, 2000.

-¡Sarah, estás haciendo demasiado ruido!-le regañó Mia en un susurro a la menor que estaba en la sala de estar.

Caminó por la sala, llevando en sus manos un pequeño plato.

Harry aún dormía boca abajo, con los brazos cruzados debajo de la almohada dejando ver su espalda desnuda.

Sonrió y se acercó hasta estar sentada en la cama, dejando el plato sobre la pequeña mesa de noche que estaba al lado.

-Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, cumpleaños, querido Harry, cumpleaños feliz-cantó ella en voz baja mientras acariciaba la espalda de Harry con sus uñas, sabía que él amaba que ella hiciera eso-. Buenos días, mi cielo, ya tienes 20. Es increíble cómo pasa el tiempo.

Ella creía que él no la escuchaba.

-Te he amado desde antes de que tuviéramos si quiera 18 años, mucho antes de que pensáramos en tener un futuro juntos, sin ni siquiera pensar en estar enamorados. Todo lo que te puedo prometer es que estoy aquí para darte todo mi amor.

Él giró sobre sí y sonrió al ver a su hermosa novia con una de sus camisetas, un moño mal hecho y sus mejillas rosadas. Ella esbozó una sonrisa al ver su rostro y apartó uno de los mechones rebeldes que cubría su frente.

Harry se inclinó hasta quedar apoyado sobre sus codos y besó la frente de Mia.

-Gracias, cielo.

Él se levantó y caminó hasta el baño, mientras Izzy le esperaba.

Volvió y rápidamente le quitó el plato de la mano para dejarlo sobre la cama y lanzarse a besarla. Ella se carcajeó y colocó su espalda sobre el colchón con el azabache sobre ella.

-Te juro que todos los días me doy cuenta de que no te merezco-le susurró Harry, besando cada parte de su cara.

Ella sonrió y unió sus labios en un beso dulce tomando su rostro entre sus manos. Harry amaba que ella hiciera eso.

-¿PODRÍAN SALIR? ¡TENGO HAMBRE!-gritó una voz desde afuera.

Harry jadeó y Mia se rió de él.

-Vamos, debes desayunar-le dijo ella colocando sus manos sobre el pecho de Harry, tratando de que se levantara.

Él se levantó con cuidado y le ofreció una de sus manos a Mia para levantarla del colchón. Por el impulso, ambos quedaron a pocos centímetros de distancia, que el azabache rompió con un pequeño beso.

-Eres todo un galán, Harry James.

Él se rió y caminó hasta la cocina, encontrándose con Sarah sentada en el sofá, mirando la televisión muggle por la cual ella y Mia habían insistido tanto. La pequeña rubia giró su cabeza y sus ojos se abrieron de emoción al ver que Harry se había despertado.

Bajó del sillón corriendo y envolvió al azabache en un abrazo:-¡Felices 20, Hazz!

Él estrechó a Sarah en sus brazos y dejó un beso sobre su frente, haciendo que ella sonriera.

-¡Te tengo un regalo!

La menor corrió hasta su habitación, pasando por el lado de Mia, que estaba apoyada en una de las esquinas de las paredes.

Volvió rápidamente con un obsequio sobre sus manos.

-Sé lo mucho que te gustan, entonces quise hacerlo yo misma-le dijo la pequeña niña.

Harry le quitó con cuidado el papel envoltorio, dejando ver una especie de libro. Era un álbum de fotos.

-Cada foto tiene algo escrito abajo-le comentó ella, acercándose por atrás- ¡Por ejemplo, esta! Fue nuestra primer foto juntos y dice: "El día en que conocí a mi hermano mayor"