I JUST WANNA BE YOURS | Harry James Potter |

𝐜𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟒𝟗

"THE BEGINNING OF THE END"

███████████████████████████████████████████

LAS CLASES SE SUSPENDIERON Y LOS EXÁMENES se aplazaron. En los días siguientes, algunos padres se llevaron a sus hijos de Hogwarts, las gemelas Patil se marcharon la mañana después de la muerte de Dumbledore, antes del desayuno, y a Zacharias Smith fue a recogerlo su altanero padre. Seamus Finnigan, en cambio, se negó rotundamente a acompañar a su madre a casa; discutieron a gritos en el vestíbulo, y al final ella permitió que él se quedara hasta después del funeral.

Harry, Mia, Ron, Hermione y Sarah pasaban todo el tiempo juntos, la menor se encontraba realmente aterrada por todo lo que pasaba, pero trataba de ocultarlo a través de sus bromas, que se habían vuelto cada vez menos recurrentes, pero sus pesadillas habían incrementado y cada vez que cerraba sus ojos, despertaba con lágrimas en sus ojos. Hermione y Mia procuraban estar con ella todo el tiempo posible.

 ―¿Ha muerto alguien más que conozcamos?― cuestionó Ron a Hermione, que leía el Diario el Profeta. Hermione hizo una mueca ante la forzada dureza en el tono de Ron. En el regazo de Mia descansaba Sarah, que había sufrido de insomnio desde la muerte de Dumbledore.

―No― contestó mientras doblaba el periódico―. Todavía están en busca de Snape, pero no hay rastro de él.

―Claro que no― intervino Harry―. No lo hallarán hasta que encuentren a Voldemort, y dado el poco éxito que han tenido hasta ahora.

Ron y Hermione se dieron una mirada significativa, mientras que Mia tomaba la mano de Harry entre las suyas, para luego dejar un beso en el dorso de ésta.

―Snape era el príncipe mestizo― soltó Harry de repente, haciendo que el trío de amigos dirigiera sus miradas hacia él―. Él inventó el sectumsempra.

―Wow, Snape era mestizo― dijo Ron sorprendido. Se hundieron en un silencio que les sirvió para escuchar como Sarah murmuraba cosas y lanzaba pequeños gritos.

―Sarah, despierta. Es un sueño, linda. No es real― dijo Mia mientras zarandeaba a la pequeña rubia en sus piernas, sin recibir respuesta alguna.

―Kelly, despierta― dijo Harry en un murmuro.

Después de varios intentos, Sarah se despertó sobresaltada y con lágrimas en sus ojos. Se dio cuenta de donde estaba y sollozó.

Harry la tomó en sus brazos como una pequeña niña y acarició su cabello, mientras que Mia acariciaba los nudillos de la rubia menor.

Hermione y Ron sonrieron ante la escena enternecidos, pensando que sus amigos podrían ser buenos padres.

███████████████████████████████████████████

―HA LLEGADO LA HORA, POR FAVOR, sigan a sus jefes de casa hasta los jardines. Los de Gryffindor, esperen a que salga yo― dijo la profesora McGonagall.

Los estudiantes se levantaron y desfilaron en un total silencio.

La profesora McGonagall permitió que Sarah tomara asiento con ellos. Desfilaron hacia el exterior. Habían colocado cientos de sillas en hileras a ambos lados de un pasillo y encaradas hacia una mesa de mármol que presidía la escena. La mitad de las sillas ya estaban ocupadas por una extraordinaria variedad de personas: elegantes y harapientas, jóvenes y viejas. Mia reconoció a gran parte de la Orden del Fénix ahí.