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Me sentía adormilada y mis sentidos no funcionan. No puedo recordar nada... Solo sé que debo buscar a Draco, hasta que escuché algo en el baño, cuando ingresé Draco estaba en el suelo, mis ojos se nublaron, las lagrimas empezaron a correr, había demasiada sangre, su cara y pecho tenía cortadas, como mil apuñaladas. No podía pensar, pero al escuchar un ruido cerca, saqué mi varita y apunté
- Avada...
- Athenea yo lo siento
Escuchar su voz era como si mis sentidos se activaran de nuevo, no podía creer que fuera Harry, y yo casi... si no hubiera dicho nada...
- Qué hiciste Potter...
Traté de usar mi magia con Draco, pero sus heridas no sanaba, tomé su mano y empecé a absorber su dolor, era insoportable, pero era lo menos que podía hacer, necesitaba que mi magia funcione y la desesperación se apoderaba de mi
- Amor... vas a estar bien, me escuchas, vas a estar bein - le susurré
-No... Yo no... - Harry no entendió y se arrodilló a mi lado. Draco temblaba de forma descontrolada en medio de un charco de sangre. Myrtle soltó un chillido ensordecedor:
-¡¡Asesinato!! ¡¡Asesinato en el lavabo!! ¡¡Asesinato!!
La puerta se abrió de golpe, suspiré aliviada cuando vi a Snape, blanco como la cera.
- Sev, ya lo he intentado pero mi magia no funciona, ayudame por favor...
Apartó bruscamente a Harry, se arrodilló y se inclinó sobre Draco; sacó su varita y la agitó por encima de las profundas heridas que había causado la maldición de Harry, murmurando un conjuro que casi parecía una canción. La hemorragia se redujo al momento. Snape le limpió la sangre de la cara y repitió el hechizo. Las heridas empezaron a cerrarse.
Gracias Merlín
susurré, pero no podía dejar de llorar, casi lo pierdo... no podía pensar una vida sin él. Harry contemplaba la escena horrorizado. Myrtle no paraba de sollozar y gemir. Cuando Snape hubo realizado su contramaldición por tercera vez, debes hablar con tus padres Athenea, Quizá le queden cicatrices, pero si tomas díctamo inmediatamente tal vez se libre hasta de eso. Ire en un momento después de hablar con Potter
- Quiero saber todo después
Llegué a la sala común, y lo llevé a mi habitación tenía todo lo necesario. le inyecté dictamo y esperaba que hiciera efecto. Los chicos llegaron y poco después llegaron mis padres, no dejaba de llorar, no podía perderlo... Mi madre lo examinó, pero era magia negra, así que mi padre intervino, dijo que se recuperaría, pero cada hora que pasa, la desesperación crecía. no podía alejarme de su lado, sé que debía descansar, comer y mis padres debían revisarme, porque me sentía demasiado débil, sé que no debí usar mi magia tan pronto, pero ya no recibía órdenes de mi cuerpo, solo quería que él despierte. Mis padres enviaron a los chicos a descansar y prometieron que avisarían si había cambio
